Nenúfar - Pureza de corazón

C60 - Sexagésimo día de no ser humano

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El cachorro bebía leche de un pequeño biberón. Las pupilas verticales de los Zerg estaban contraídas y sus ojos brillaban. Parecían cristales brillantes. Las cosas que les enseñaron los dos humanos eran realmente útiles. Este biberón fue inventado por los humanos...

En ese momento, los Zerg vieron las ventajas de sus enemigos de la vieja era. En cuanto a la crianza de bebés, los humanos tenían muchas referencias.

Después de beber el primer bocado de leche del biberón, Gu Huai sintió que no tenía fondo como persona, aunque ahora no lo fuera. Puesto que ya había soportado la humillante carga de beberse el primer bocado, se lo bebería todo. De lo contrario, esta carga humillante no tendría sentido.

Gu Huai se dio mucha construcción mental. En ese momento, la boca del cachorro rodeaba el pequeño biberón. Sus ojos dorados miraban el biberón y se esforzaban por beber la leche, queriendo terminar rápidamente la leche del biberón.

Cada vez que el cachorro chupaba el biberón, la succión producía un ligero sonido. En realidad, este sonido era muy leve, pero debido a la excelente capacidad auditiva de los Zerg, el sonido de este biberón podía calificarse de muy claro. Una vez que apareció este sonido, hubo Zerg en la habitación a los que les costó respirar y se inclinaron ligeramente hacia atrás, pero ningún Zerg cayó de espaldas.

No fue porque el impacto no fuera lo suficientemente grande. Simplemente sentían que no podían perderse la escena de su rey bebiendo leche de un biberón, así que persistieron con una fuerte voluntad.

Mientras tanto, Gu Huai cerró los ojos y no les prestó atención. El pequeño biberón no podía contener mucha leche. Gu Huai gruñó mientras bebía y pronto se la acabó. El biberón estaba vacío.

El rey terminó su primer biberón de leche y los Zerg estaban emocionados y felices. Esto era algo particularmente memorable. Una vez que la terminó, Gu Huai sintió como si todo su cuerpo se hubiera sublimado. Aiyi tomó el biberón vacío de la boca del bebé y pensó qué hacer a continuación.

Los dos humanos dijeron que después de beber la leche, levantara al bebé y le diera golpecitos en la espalda. Aiyi así lo hizo. Levantó con cuidado al cachorro negro sobre su pierna y le dio unas palmaditas en la espalda con la menor fuerza.

Después de eructar, Gu Huai volvió a su posición anterior. El cachorro negro de la mesa ya estaba redondo. Después de beber una botella entera de leche, su estómago estaba abultado y su cuerpo parecía más redondo.

El rey era muy lindo. Los Zerg no querían hacer nada. Solo tenían que mirar a su rey en su forma de bebé durante todo el día y sentirían alegría.

Después de experimentar una vida difícil, Gu Huai miró a todos los Zerg de la habitación y se consoló diciendo que había hecho algo significativo. Mientras tanto, Alves estaba en su forma de cachorro y colocó su pequeña cola gris plateada alrededor del cachorro a su lado, usando su cola para tirar del cachorro negro. Desde que Gu Huai no quiso usar el biberón, Alves no se había interesado por la tarea de alimentarlo. Ahora, su instintivo deseo de monopolio le obligaba a utilizar esta acción.

Gu Huai pudo comprender a grandes rasgos la reacción de Alves. Sabía que a este gran gato se le podía engatusar siempre que fuera obediente. Así, una vez que el cachorro negro terminó de beber leche, los dos cachorros redondos se pegaron de nuevo.

Gu Huai había aceptado la invitación de ir a Levin para establecer relaciones diplomáticas con los Fields. Ahora que esta tarea se había completado, podían volver a Tuser. Aunque Gu Huai no dijera que quería volver a Tuser, los Zerg que lo siguieron al planeta estaban ansiosos por volver a casa. El Tuser de hoy tenía las defensas más poderosas. Podría llamarse una fortaleza de acero. Su rey estaba en ese momento en su forma de bebé y tenían que protegerlo en el lugar más seguro.