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TENSIÓN
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El pasillo estaba lleno de estudiantes, pues aparentemente, estábamos todos en nuestra hora libre antes de la siguiente clase.
A lo lejos, vi una cabellera rubia familiar y caminé directamente hacia ella.

— ¡Oye, Malfoy! — Llamé la atención de Draco. Estaba hablando con sus amigos Crabbe y Goyle, quienes, cuando me vieron, se alejaron.

Draco me miró con una sonrisa amable. —Hola, Lilith. ¿Lista para el partido de mañana? Todo el mundo está hablando de eso — dijo apoyándose contra la pared.

— Sí, ya he tenido algunas charlas al respecto — mustié recordando el encuentro con Plums y a Weasley afirmando lo fuerte que me golpearía con la bludger.

— Sabes que eres la mejor Golpeada de todo Hogwarts. Además, ya ganamos a Ravenclaw y a Hufflepuff, y el estúpido de Potter está muy débil debido a la presencia de los Dementores.

— Algo escuché, ¿no se cayó del cielo durante el partido contra Hufflepuff?

— ¡Sí, qué jodido idiota! — él rió.

En ese preciso momento, el mencionado Potter apareció por el pasillo. Como siempre, estaba acompañado por sus dos amigos; Granger y el pequeño Weasley.

— Malfoy es un buen Buscador, me duele decirlo, pero lo es. Harry, tenemos que buscarte una buena escoba o perderemos contra esos idiotas — dijo el pequeño Weasley (creo que se llamaba Ron o algo así).

— Si yo fuera tú, no me preocuparía demasiado, Potter. ¡Vas a perder de todos modos! — gritó Draco, haciendo que los tres se giraran y nos miraran.

Aunque había sido Weasley quien había hablado, Draco había ido directo a atacar a Harry. Típico de él.

Le di a Draco una mirada severa. Nunca entendería porqué le gustaba tanto meterse con ellos.

— Cállate, Malfoy — siseó Potter dándole una mirada seria. — Los Dementores no estarán allí, y no dudaré durante el partido. Ni siquiera todo el dinero de tu padre te haría ganar.

Draco cambió su expresión. Sabía que su relación con su padre era algo complicada. Quizás por eso siempre sentí que podíamos ser amigos.

— Oye, cálmate, eh. Ya sabemos que tú eres el Gran Potter — intervine antes de que Draco pudiera decir algo. — El equipo de Slytherin tiene más que Draco y su dinero, ¿sabes? Algunos de nosotros no necesitamos la reputación de papi para convertirnos en un buen jugador de Quidditch.

Los ojos verdes de Harry estaban llenos de sorpresa, no esperaba que le respondiera. Probablemente sabía que yo era la sobrina de Snape y, a diferencia de los Gryffindor de mi curso, la mayoría de los estudiantes ni siquiera se me acercaban por temor a la reacción de mi tío.

— Cuidado, Harry. Es Lilith Arambella, la Golpeadora de Slytherin y la sobrina de Snape — Hermione les susurró a Potter y Weasley.
Ronald me miró de arriba abajo con bastante molestia.

— Wow, estaba a punto de presentarme pero veo que soy tan famosa que ni siquiera necesito hacerlo — respondí irónicamente cruzando los brazos frente a mi pecho. — No sabía que estabas tan interesada en mí, Granger. Tal vez la próxima vez me podrías pedir directamente una cita para que puedas conocer más detalles.

Ella jadeó y estaba a punto de responder con lo que estoy segura que habría sido algo ingenioso, cuando alguien apareció antes de que ella hablara.

— Defendiendo a Malfoy, ¿eh? No sabía que te gustaban los yogurines, Lilith — Fred interrumpió, tratando de sonar gracioso mientras los tres niños lo miraban como si fuera una especie de héroe.

WICKED HATE | FRED WEASLEY (traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora