2. Sin arrepentimientos

37.4K 1.2K 254
                                    

EMILY

Nos encontramos sentados mirándonos directamente, mientras al costado estaba la tienda.

¿Qué hago aquí con él? Yo también me lo preguntó, es rara la manera que nos conocimos, pero más extraña la manera en cómo nos llevamos.

Él simplemente me hubiera dicho que me vaya o me hubiera dejado ahí en la lluvia como yo lo hice, pero no lo hizo y por qué aún no lose.

Tampoco preguntaría eso, porque sonaría descortés.

—Entonces, ¿qué haras? —pregunte.

—Supongo que luchar por ella —lo dijo después de beber un poco de su bebida que era sabor a plátano.

—Pero, ¿no te rendirás?

—No la forzaré a estar conmigo, pero si are que sienta algo por mí o que por lo menos dude de su respuesta.

—Entonces, ¿no estamos celebrando tu rechazo? —fruncí el ceño.

—No digo que no, puede que me rinda, pero antes de rendirme are todo lo posible, y así no aturdirme con un arrepentimiento. Prefiero que celebremos la forma tan extraña en la que me conociste.

—Nos conocimos —aclaré.

—Ujum. Como digas.

A veces los hombres también pueden llegar a ser complicados o simplemente tan extraños, pero él era ambas cosas.

—Bueno entonces, celebremos lo infelizmente feliz que somos —fingí una sonrisa no propia de mí.

—Eres rara —se limitó a decir.

Después de eso empezamos a contarnos ciertas cosas, como por ejemplo le conté que mi mayor defecto era que era muy dormilona, mientras él con su ego me decía que su mayor defecto era que era demasiado "perfecto" o que era "el mejor partido".

Espero que lo diga solo por qué quiere ser gracioso.

Después de toda nuestra plática decidí irme, Thiago se ofreció a llevarme, pero me negué, le mentí diciéndole que mi casa estaba a solo unas cuadras de ahí.

Ahora me arrepiento, no sé dónde estaba porque aquí la señorita por tomar el camino equivocado ahora se encuentra perdida y tiene que tomar un taxi para llegar a casa.

Solo que ni un taxi es seguro. Así que subí a uno y cada diez minutos enviaba mi ubicación a Sofia por WhatsApp.

En fin, uno siempre regresa a casa, pero no para dormir, si no para hacer sus tareas y limpiar la casa.

Lo que callamos los adolescentes.

.....

Me levanté rápido al escuchar a mi madre gritarme.

—¡Emily otra vez tarde! —sus gritos eran como de costumbre.

Vi la hora por mi celular, marcaba las 6:30 am.

¿Qué persona normal se levanta a esta hora y dice que es tarde?

Después de alistarme bajé de las escaleras para desayunar sola, mi madre ya se habrá ido cuando me despertó.

A pesar de haberme levantado temprano yo caminando soy muy lenta, así que a veces el bus se va y me quedo esperando otro o simplemente elijo correr, cosa que es aún peor. Por lo que temprano no llegaré y la verdad no me molesta, lo tomo como un estilo de vida.

Cuando llegué me encontré con Sofia quien estaba en la entrada de la escuela.

—¿Y ese milagro que llegas casi tarde y un viernes? —pregunto ella dando una risa maliciosa.

INFELIZMENTE FELIZWhere stories live. Discover now