41. Emociones que alteran

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RODRIGO

Estar con la chica que quiero, a cambio de destruir una relación que acaba de comenzar, ¿es justo para ella? ¿Es justo para mi amigo?... la quiero a mi lado, la quiero a ella, la quiero porque ella me sumo en todos los aspectos posibles, incluso sé que me dolería más a mí verla llorar que ella llorando. Disfruto verla reír, verla desafiar a todos, disfruto como es ella.

«Una oportunidad, se me está dando una oportunidad... pero no la correcta. Porque estoy poniendo por encima de su felicidad mi deseo, el deseo de besarla, tocarla, acariciarle... el deseo de decirle que la quiero.»

Me dolió escuchar que ella ya es feliz con alguien más.

Tuve que fingir alegría por ellos mientras por dentro, algo se destruía.

Pero, aun así, no la soltaría, aun sabiendo que ella no me quiere de la manera en la que yo lo hago, no hará que me aleje, ¿por qué tendría que soltar a la persona que quiero y que me hace sentir bien?, si lo hiciera, entonces jamás la quise lo suficiente como para terminar soltándola.

No es su culpa el no quererme.

No es su culpa que yo no haya tenido que darme cuenta antes y negarme a lo que siento.

Son mis sentimientos, y sé que alejarme de ella no cambiaría el hecho de que ella esté con él. Entonces... yo estaré a su lado y si en algún momento ella llegara a terminar con Thiago, buscaría una oportunidad. Si aún la quiero, buscaría mi oportunidad. Me dolerá, sé que me dolerá, pero me dolerá más saber que ella no está segura.

Cuando sepa que ella estará bien, estará segura, estará tranquila. Y aun yo la quiera, solo así yo me iría de su lado, porque sé que me iría sabiendo que ella estará bien. Porque sé que no me dolerá más preguntarme si ella comió, se enfermó, estuvo en problemas o no, porque sé que ella ya estará bien.

Solo si Emily esta cien por ciento segura, sabré que llego el momento de alejarme, no para siempre, porque eso significaría soltar a alguien a quien me ayudo en mucho y a la cual le di tan poco, solo me iría para emprender un nuevo camino y regresaría para que ese camino, este a la par con ella, con todos ellos.

—No —respondí—, no te ayudaré. Y si eso significa que jamás me cuentes lo que te carcome, estoy dispuesto a ayudarte de todos modos, te ayudaré a que eso no sea tan pesado, pero no de la manera en la que quieres, no así.

—Esa es la única manera.

—Siempre hay más opciones.

—¿Cómo cuáles? ¿Decirles la verdad?

—Si, eso mismo. No dices que tiene que ver con Emily y Thiago, ellos ya están juntos, solo diles y si lo enfrentan juntos tú estarás tranquila y ellos podrán superarlo juntos.

—Suena fácil, lo dices como si esto no fuera algo tan pesado —soltó.

—¿Acaso vez el futuro cómo para saber lo que le ocurrirá a ellos?

—Creeme Rodrigo, si tú lo supieras pensarías igual que yo.

—Yo estaré a tu lado, Samy, sabes que lo estaré, siempre lo estuve, tanto tú como yo, siempre estuvimos juntos, incluso sabes que yo no suelto a una amiga, y tú, siempre serás mi amiga.

—Entonces ayúdame —insistió, uniendo sus labios y mirándome con ojos casi rojos, con desesperación.

—Te ayudé en esa estúpida y mala decisión de coquetear a Emily, lo hice y de nada sirvió, porque tú terminaste queriendo a Thiago y yo a Emily, lo hicimos y terminaron juntos —me detuve—, no, empezamos algo y jamás lo terminamos, no porque no supimos cómo, fue porque tanto tú como yo no deseábamos destruir lo que terminamos queriendo, bueno... yo le pongo un fin a todo esto. Seré tu amigo, te apoyaré, te aconsejaré, seré el hombro donde puedas llorar; pero no haré que tu sola te lastimes, porque sé que si sigues haciéndolo, saldrás lastimada.

INFELIZMENTE FELIZWhere stories live. Discover now