❍ Capítulo 1

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-Ursula Dandrina.

-¡Presente! - Diría en alto, levantándome de la silla y alzando la mano.

Habíamos empezado ya las clases, un nuevo comienzo, estaba ciertamente asustada y agobiada por el mero hecho de que, a partir de ahora, todo lo que hiciera, tendría importancia para un posible futuro trabajo.

Esta vez era la oportunidad única para poder ayudar a mis padres en casa con el dinero, aunque siempre me dijeron que no era necesario y que ahorrara el dinero para mí misma.

Era difícil.

La estima por mis padres era alta, era difícil irme a vivir sola, primero porque estaba sola y eso involucraba que los precios iban a ser más difíciles para mí a la hora de pagarlos. Y aún más con los últimos rumores.

Había una historia en el pueblo donde yo vivía. Monstruos y humanos convivieron una vez juntos y vivían en paz hasta que el caos y los problemas comenzarían. Se rumoreaba de que había magos en su momento que intentaron mantenerlo todo en calma, pero que no funcionó más que solamente encerrarlos en el subsuelo. Y al parecer, en la actualidad, habían salido gracias a un niño ciertamente especial. Ahora se estaba debatiendo que hacer con ellos.

¿Habrían cambiado? Quién sabe...

Yo estaba bien con mantenerme viva, estar con mis amigos y familia y conseguir un trabajo, porque por alguna razón, antes tenía muy mala suerte, pero ahora que las cosas parecen ir bien...

Era la oportunidad.

Mi mala suerte se relacionaba en que todo lo que era mi alrededor no parecía beneficiarme mucho, afectó a veces mi salud física y mental, también a la de mis padres, los estudios iban bien como de repente no era capaz de concentrarme o me encerraba. Me agobiaba esto, aunque ya hace mucho desde lo ocurrido y parece que ahora todo un rumbo más calmado.

Por ello las siguientes semanas, iba estar muy a tope, demostrando que era capaz y que conseguiría un puesto de trabajo decente, pues no iba a dejar una oportunidad como esta, ahora era el momento en el que tenía que aprovechar todo. Así pues, el día fue ciertamente productivo para mí, no solo me centré en lo que me importaba, sino que también estuve con mis amigas y amigos.

Ah... Seguimos juntos durante tanto tiempo, amigos de infancia... Comenzando con Carlos, luego con Elena, Maria y luego Carol junto a su hermano Zen.

El primero era el más alto, algo moreno, de cabello rubio, ciertamente fuerte la verdad, de hecho, iba al gimnasio. Carlos es un chico que siempre se ha preocupado por los demás y que siempre daría todo por nosotros, amable, compasivo y cariñoso. De vez en cuando podías ver como tocaba el ukelele o aparecía con su coche con una sonrisa calmada para invitarnos a salir por ahí.

Elena era la siguiente, calmada, amable, quiso ser médica, pero la situación está difícil, igual sabe muchísimo sobre ello y como aplicarlo. Eso no quita de que quiera serlo, a día de hoy sigue estudiando mucho sobre ello, se informa, intenta hacer prácticas, aunque no puede porque muchos de los materiales que necesita no los puede obtener a no ser que estudie directamente de ello. Su madre, apoya mucho sus ideas, por ello cuando vuelve de trabajar siempre le trae libros u objetos que le venga bien a ella.

Maria, ciertamente... Rara... Parecía que siempre sabía todo lo que pensábamos en todo momento, pero ella decía que era simple intuición. Le encantaba hacer trabajas en los juegos de cartas, mostraba una sonrisa confiada al juega. Era conocida pro ser una tramposa, pero ella siempre dice que no es así, que, si no sabían perder, no era su culpa. Vive sola, algo desorganizada y caótica, duerme mucho y no se si come decentemente porque siempre la veo algo delgada.

𝗔𝗟𝗠𝗔𝗦 𝗨𝗡𝗜𝗗𝗔𝗦 - 𝗙𝗟𝗢𝗪𝗘𝗬Where stories live. Discover now