Capítulo 2.20

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Había que admitir que Alphys era alguien que lograba confundirme y dejarme más perdida que antes, pues sus indicaciones eran caóticas y muchas veces me metía en un peligro grave que involucraba mi muerte.

Cada vez que pasaba eso, ella me pedía perdón sin descanso, realmente parecía estar arrepentida por lo ocurrido, pero yo simplemente la calmaba y le decía que no pasaba nada ya que seguía viva. Ella lograba calmarse más o menos.

Como era de esperar, también habrían obstáculos de por medio, trampas de las cuales tenía que evitar equivocarme y varias pruebas en las que depositaba toda mi confianza en Alphys. En esas salimos victoriosas y lo celebrabamos con ilusión.

Había momentos en los que tenía que hacer sola los acertijos, como era de esperar, entre ellos eran tener que disparar a unos cubos para poder darme acceso a la siguiente planta. En ellos estaba un buen rato para poder hacerlo bien y seguir avanzando. Cuando completaba aquella pequeña misión, Alphys hacia siempre dos cosas:

La primera es que en el teléfono que me dieron podía acceder a las redes sociales de los demás, Alphys me dio su teléfono y su perfil de aquella red, viendo así todos sus constantes estados en los que ella se subía fotos con un rostro feliz.

Lo segundo es que a veces me llamaba para no solo aconsejarme, sino que darme pequeñas pistas sobre quien es ella y Mettaton, a la vez que otros personajes del subsuelo en el que también interactuaban en las redes, como por ejemplo Papyrus.

Me resultaba gracioso ver algo así y tampoco me esperaba que en el subsuelo hubieran redes sociales, capaz por ello con mis amigos tenía el acceso a cobertura en según que ocasiones.

Sea el caso que sea, Alphys tenía un mal presentimiento cunado desbloqueamos todas las puertas, estaba a punto de cruzar por unas plataformas de aires que me impulsarían hacia el frente -algo que me resulta peligroso-, para luego ir al segundo piso.

-¡Hey! Los acertijos de mover a la derecha e izquierda -me había llamado, arqueé la ceja sorprendida, pues eso ya me lo había explicado.

-Los he hecho, ALphys, ¿no recuerdas? -al preguntarle eso, se asustó un poco.

-Oh, ya... Sí... Ah...

-¿Todo bien? -pregunté preocupada.

-S-Sí... V-Ve con ojo, por favor.

Colgó, me rasqué la cabeza confundida, pero decidí avanzar por aquellas plataformas de aire, aterrizando en un terreno más distinto al que me acostumbraba, pues en este caso era como un suelo preparado para un tipo de programa. Tragué saliva algo nerviosa, pues algo me decía que iba a estar en un problema con Mettaton.

Al acercarme, me di cuenta que las luces estaban totalmente apagadas, escuché mi teléfono sonar y lo agarré, Alphys me estaba viendo y notó que estaba todo oscuro, por ello encendió las luces. No sé si fue una buena idea o una mala idea.

De pronto me di cuenta que estaba en una cocina, mejor dicho, estaba en lo que parecía ser un programa de cocina, en frente mía tenía una mesa donde cortaríamos algunos alimentos, una tabla de cortar, cuchillos, fregadero, un bol...

-Oh no... -susurró Alphys preocupada.

-¡¡¡OHH SIII!! -Mettaton apareció de golpe a mi izquierda, casi me caí al suelo del susto-. ¡¡BIENVENIDOS, BELLEZAS, A LA PREMIER DEL SHOW DE COCINA DEL SUBSUELO!! -anunció feliz.

-Ay no -murmuré preocupada. Al decir esto pude escuchar un ruido suave como si fuera el efecto de unos brillos, me moví para ver un cartel grande que decía "Cocinando con un robot asesino"-. Ay no, no, no -me puse nerviosa.

-¡Preparad vuestras cocinas porque hoy tenemos una receta muy especial! -siguió presentando el programa. Tragué saliva nerviosa-. ¡Hoy haremos...! -sonó de golpe un redoble de tambores-. ¡Una tarta!

𝗔𝗟𝗠𝗔𝗦 𝗨𝗡𝗜𝗗𝗔𝗦 - 𝗙𝗟𝗢𝗪𝗘𝗬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora