Capítulo 2.10

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Snowdin era como lo recordé la vez que vine aquí con Flowey, solo que era mucho más animado y bonito que la anterior vez, viendo a distintos monstruos hablando entre ellos, jugando con la nieve o simplemente descansando tras un largo día. Seguía a Papyrus con calma, él me indicaba cada caseta que veía.

Unas eran unas tiendas para poder comprar, otras eran viviendas simples de vecinos que tenían, otro era el bar de Grillby, se notaba muchísimo por la decoración exterior que tenía el local, las ventanas grandes, el cartel que indicaba que era un bar, la estructura... En definitiva, todo en si se hacía denotar.

Seguimos avanzando y pronto me encontraría con la casa de Sans y Papyrus, ahí me explicó que podía descansar en su casa sin problema alguno y esto me sorprendió, tanto que abrí la boca por unos segundos porque no entendía a donde quería llegar Papyrus.

¿Me quiere capturar, pero me deja dormir en su casa? - Me pregunté sorprendida.

-¡SE QUE ANDAS SORPRENDIDA! ¡PERO A MI PRIMERA HUMANA DEBO TRATARLA BIEN PARA QUE UNDYNE VEA BIEN QUE ERES UNA HUMANA COMO TAL! - Expresó con seguridad. Me rasqué la cabeza confundida. -. ¡EN LA BATALLA, GANARÉ CONTRA TI Y TE RENDIRÁS, POR ELLO CUANDO DEMUESTRE A UNDYNE LO FUERTE QUE SOY, ME ADMITIRÁ COMO PARTE DE LA GUARDIA REAL!

Soltó una risa confiada, entró a su casa de golpe, dejando la puerta abierta para que yo accediera a esta. Me quedé unos pocos segundos a fuera porque me costaba asimilar toda esta situación, pero lo acepté como mejor pude entrando a su casa.

El hogar de los hermanos esqueletos no era muy complejo, nada más entrar estaba el comedor, en la izquierda había un pequeño sitio donde estaba la cocina, había un segundo piso donde habían dos habitaciones que eran las de Sans y Papyrus. Tenía claro que iba a dormir en el sofá.

Papyrus estaba en al cocina y escuché como movía varios objetos dentro de la cocina, tanto que hizo un gran ruido que me preocupó, intenté mirar y solo veía como Papyrus se ponía nervioso porque no se aclaraba con que olla hacer la comida. Me alejé poco a poco con cierto nerviosismo y decidí quedarme quieta en el sofá para no molestar.

Sans entró el último cerrando la puerta de la casa con cierta vagancia, me miró por unos segundos, viendo que estaba algo nerviosa e indecisa. Él, con una sonrisa típica, se acercó para sentarse a mi lado.

-¿Nerviosa por tu cita? - Vaciló.

-¿Qué? - Pregunté girando mi cabeza de golpe. -. ¿Pero no me quería capturar?

-Es una broma, tranquila - Respondió con una risa. Suspiré algo nerviosa. -. Te cuesta asimilar esto, ¿qué ocurre?

-Bueno, no es normal que tu hermano me quiera capturar, pero me esté cuidando y me deje dormir en vuestra casa - Admití.

-Mi hermano no es malo, él cree que capturar es cuidar de alguien y luego dárselo a Undyne para luego ser parte de la guardia real - Explicó con calma. -. No tiene maldad, como habrás visto.

-Sí, pero es sorprendente... - Murmuré.

-También es sorprendente que nos tengas tanta confianza y que al vernos sonrieras con calma, como si nos conocieras de toda la vida, cuando los humanos por lo general nos odian - Soltó de golpe. Le miré de reojo sorprendida.

No se equivoca en nada... Pero no puedo dejar que sepa que soy de otra línea temporal - Pensé nerviosa.

-E-Es que... Se de vosotros porque... - Murmuré por un momento pensando bien que decir. -... Fui porque en los libros de mi centro hablaban de mitos extraños sobre otros humanos que cayeron aquí, también se vuestro pasado y no me creía que los monstruos fueran malos... No me creía ninguna palabra que decían los demás sobre que erais malos.

𝗔𝗟𝗠𝗔𝗦 𝗨𝗡𝗜𝗗𝗔𝗦 - 𝗙𝗟𝗢𝗪𝗘𝗬Onde histórias criam vida. Descubra agora