VI. Academia

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Jin miró deprimida el suelo mientras arrastraba su bonito bolso rosado por el suelo de la academia hacia su curso luego del tedioso discurso del Hokage por el nuevo ingreso escolar. Su aura oscurecida y azul alejaba a las personas a su alrededor hasta que accidentalmente chocó con alguien y cayó al suelo.

—¡Oh! ¡Eres la niña del mercado! —habló una animada voz y Jin, por primera vez desde que inició el día, despegó su cabeza del suelo quitando su mirada miserable para encontrarse con la mirada brillante y animada del niño Uchiha que le tendía la mano para ayudarla a levantarse.

—¿Obito-kun? —preguntó sorprendida y el Uchiha sonrió.

—¡Así es, soy yo, Jin-chan! —exclamó Obito sonriendo felizmente y Jin abrió sus ojos antes de aceptar tímidamente la mano del chico— ¡Waa! ¡Eres muy liviana! —exclamó sorprendido cuando ella chocó contra él— ¿Cómo me derribaste en primer lugar?

Obito miró con verdadera curiosidad e intriga a la niña, Jin era demasiado liviana y con la fuerza de una sola mano, casi la manda a volar al ayudarla a levantarse del suelo.

—¡Obito-kun! —exclamó Jin sonrojada mirando como el chico reía ligeramente.

—¡Ese es mi nombre! —sonrió el Uchiha— Nee, nee, Jin-chan, ¿A qué clase vas? —preguntó Obito con curiosidad.

Jin respondió suavemente y el Uchiha le sonrió nuevamente.

Sinceramente, Jin no recuerda mucho mientras estaba mareada por la felicidad burbujeante que podía emanar del chico Uchiha en todo momento, esa actitud positiva y su gran energía era casi contagiosa y, en menos de lo que podía pensar, estaban en la hora de almuerzo.

—Nee... —Jin intentó llamar a Obito.

—¡Rin-chan! —pero fue demasiado tarde, Obito corrió detrás de la castaña y Jin suspiró profundamente hundiéndose decepcionada en su asiento.

Mientras comía su almuerzo, Jin empezó a observar por la ventana distraídamente hasta que su mirada se posó en Guy, el cual estaba corriendo por todo el amplio patio de entrenamiento, dándole vueltas durante minutos, sino horas, alrededor de los patios utilizados para ejercicios prácticos que involucren la esencia de su trabajo como shinobis. Tragando su último bocado de comida, Jin ató su bento en la tela en el que venía originalmente y luego lo metió en su bolso rosado en donde traía todos los materiales que podría necesitar en la academia.

Al ver que le quedaban unos minutos más para que se terminara el almuerzo, Jin se fue al campo de entrenamiento para ver a Guy correr sus vueltas.

Para otros podría ser aburrido, ¿Pero para ella? Era un poco admirable, en especial porque ella ni siquiera podría darle toda una vuelta sin caer muerta al costado del camino. Debajo de la sombra de un árbol, observó al niño seguir corriendo hasta que una pelota cayó a sus pies.

—¡Oi! ¿Podrías devolver la pelota? —exclamó un niño castaño con los ojos ligeramente aburridos mientras que en sus dientes había un palillo de dientes...

—¿Es eso un senbon? —preguntó curiosamente Jin mientras le entregaba la pelota en las manos al chico castaño.

—¿Mmm? No, es un mondadientes —respondió despreocupadamente el chico—. Aunque he pensado en llevar un senbon, pero el kit está a un precio considerable —tarareó pensativamente.

—Veo... creo que te verías genial con un senbon —asintió Jin recordando lo cool que se veía Genma cuando grande con su característico senbon.

—¿Tú crees? —preguntó con curiosidad y Jin asintió con una sonrisa tonta en su rostro— Veo... ¿Quieres jugar con nosotros?

—¿Quiénes...?

—¡Oi, Genma! ¡Deja de coquetear y pasa la pelota! —gritó un niño de cabello castaño oscuro, casi negro. Genma suspiró.

—Con ellos... —el castaño miró tranquilamente a su amigo... hasta que le tiró la pelota en la cara.

—¡Bastardo! —gritó su amigo recibiendo la pelota con toda la cara y cayendo de espaldas, Genma soltó una pequeña risita burlona.

—Por cierto, mi nombre es Shiranui Genma —el chico estiró su mano hacia Jin— ¿Y el tuyo?

—¡Soy Habibi Jin, un placer conocerte, Shiranui-san! —exclamó felizmente Jin apretando sus manos con emoción, Genma se sonrojó ligeramente por lo cerca que estaba la chica de él.

—Maa... puedes llamarme por mi nombre, no hace falta tantas formalidades, ¿Sabes? —descartó Genma suavemente.

—Entonces puedes llamarme Jin, Genma-kun —Jin le sonrió felizmente y el castaño asintió ligeramente.

—Entonces te presentaré a mis amigos, Jin-chan —habló suavemente el castaño con una pequeña sonrisa.

Sorprendentemente... los chicos canónicos eran muy agradables. Los chicos canónicos eran un mundo aparte de todos los mocosos malcriados que se había encontrado al principio en esta vida, todos fueron super amables con ella y le enseñaron a jugar a todo tipo de juegos luego de que ella tímidamente les revelara que usualmente los otros niños la discriminaban por su peculiar cabello azul y sus ojos fucsia.

Jin temió convertirse en una puta de atención, realmente amaba lo protectores que eran los chicos con ella y como eran tan amables.

Al parecer, eran pocas las mujeres que se unían a la academia por cuenta propia, en especial en este ambiente hostil entre las naciones y el aire tenso que llena de incertidumbre la aldea.

Jin hizo un ligero puchero al darse cuenta que gran parte de sus compañeros de equipo estaban divididos en diferentes clases. Ebisu era un año mayor que ella, mientras que Genma era dos, casi tres, años mayor que ella y Aoba y Raido oscilaban entre tres a cinco años mayores.

Pensando en lo agradables que eran las personas del Cannon, Jin decidió que tendría que intentar hacerse amiga de Kurenai y Rin, tal vez de esa forma, pueda tener un poco de manto de protagonistas y no morir patéticamente en la próxima guerra que se acerca...

Hablando de la guerra, Jin miró preocupada los registros de los genin oficiales generados entre los anteriores años en épocas de guerra y no pudo evitar jadear escandalizada.

La mayoría de los niños se graduaban a los nueve años y participaban en la guerra...

Pensando en eso, Jin se dio cuenta de porque la línea original de Naruto podía verse haciendo los exámenes Chunin antes de tiempo con los participantes más jóvenes. Si Kakashi se hizo genin a los cinco, Chunin a los seis y Jounin a los 13... no... algo no cuadra, Obito falla los exámenes Chunin como a los nueve años y a los 11 se hace Chunin, pero en los exámenes que Obito falla, Kakashi se hace Chunin y la elección de equipos no le permitiría que Kakashi sea un Chunin tan joven, aparte de que cuando se convierte en Chunin se ve bastante crecidito para un niño de seis años y...-

Jin se revuelve el pelo molesta.

La línea de tiempo de Naruto es una completa mierda, no entiende nada...

Tal vez más que Kakashi sea un Chunin a los seis años... ¿Tal vez Kishimoto quería decir que "tenía la habilidad" de un Chunin a los seis años? Porque por más que lo intente, las fechas no le cuadran.

Es más, con la información que tenía actualmente, ¡Los equipos estarían muy mal proporcionados! Anko ni siquiera se había unido a la academia porque era menor que la generación de Kakashi, sin embargo, Anko en los exámenes Chunin fue derrotada por el equipo de Hayate, Ibiki y un random que no se acuerda de su nombre, pero Ayate era menor que Anko... ¡Dios! ¡Es una mierda! ¡La línea de tiempo es una completa mierda!

Jin decidió simplemente empezar a fluir con el programa, lo que pase tendrá que pasar, así de simple...

Descartando todo pensamiento complicado, Jin miró el extenso campo de entrenamiento en el que había visto correr a Guy... y lloró internamente.

De nuevo, ¿Por qué necesitaba una prueba de aptitud física? Mirando a todos sus compañeros de curso emocionados, Jin solo quería morir.

Obviamente iba a ser la última...

So Simp [Yandere! Uchiha Obito]Where stories live. Discover now