― Di que eres mío.
― Tú primero...
La conversación llegó a su cabeza mientras Mike observaba las fotos que revelaban el dolor y la tragedia en la que había caído Emiliano Blake.
Mike había sido tan culpable como Eros, su amante de toda la vida. Lo...
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― ¿Y bien? ¿a qué se debe todo el circo?, más vale que se apresuren, me muero de hambre...
Agregó Bastian, con fastidio. Dominic y Martin se sentaban junto a Emiliano y a los dueños de casa, Chris e Ignacio.
Esto era serio, por lo tanto, debían hablarlo en el lugar más discreto posible y estaba claro que el hotel estaba atestado de gente que los escucharía. Chris e Ignacio habían ofrecido su hogar sin objeciones, a pesar del enorme peligro que eso conllevaba.
― ¿Qué tanto conoces a Amalia Sarich?
Bastian dejó el celular sobre la mesa y se enfocó en Martin quien lo observaba como si lo que él iba a decir fuera una pieza fundamental.
― No mucho, una niña linda, muy tímida, de las más inteligentes, primera de la clase, solía copiarle la tarea de matemática.
― Entonces es tu amiga.
― No, más bien, iba... le daba una sonrisa, tocaba su mejilla y ella me cedía su tarea...
― Eres un imbécil manipulador.
― Mira quien lo dice, hermanito...
Martin le dio una sonrisa fingida mostrándole el dedo medio. Odiaba cuando el mocoso tenía razón.
― Por favor, esto es serio — replicó Emiliano — ¿qué tiene que ver esa chica con nosotros?
― Bueno — Dominic lanzó las fotos sobre la amplia mesa — el verdadero nombre de ella es Victoria Brennan, es hija de Caely, la tuvo cuando era muy joven, fruto de una relación con un chico de su ciudad quien nunca se hizo cargo de la niña...
― ¿En qué nos beneficia esto?
― Por Dios, hombre, hasta yo me he dado cuenta por donde va esto y soy bastante tonto.
― Lamento que mi inocencia sea motivo de enojo para ti, Bastian.
Añadió Emiliano con molestia, observándolos a todos quienes negaban ante lo que estaban a punto de llevar adelante.
― Es muy arriesgado...
― Sabía que dirías eso, Damián, pero, es nuestra única alternativa...
El médico estiró los rulos de su cabello con los dedos y llevó su espalda hacia atrás para dar con el respaldo de la silla.
― Perdón, ¿alguien puede explicarme?
― Dominic quiere que hagamos un intercambio, Emi. La chica por tu esposo y los Brandon.
