: 61 :

3.1K 486 60
                                    

—Oh no, mierda —Yeji resopló fastidiada cuando apareció en la casa del doctor Hun y notó la ausencia de Namjoon–. Huyó —dijo convencida.

—Lo eché —explicó Taehyung—. Ahora estoy a cargo.

Yeji empezó a reír a carcajadas. Taehyung permitió que siguiera adelante con el ataque de risa todo lo que quisiera hasta que por fin el aire abandonó por completo los pulmones de la chica y la obligó a detenerse. Jadeando y con los ojos llenos de lágrimas, Yeji se pinchó el puente de la nariz y negó con la cabeza para luego decir:

—Mira hasta qué punto hemos llegado.

—Estás con nosotros y no, esto no es una democracia. Tu voto no vale. No puedes irte por tu cuenta, te quedarás y harás lo que yo te ordene sin reclamar —explicó Taehyung.

—¿O si no qué? —lo retó ella.

—Changkyun —dijo el castaño con voz serena.

El nombrado sonrió como demente y desenvainó un par de katanas que el doctor Hun había recibido como pago por haber ayudado a un yakuza un año atrás. El chico se había adueñado de el par de espadas sin mucho esfuerzo. Con unos cuantos movimientos Changkyun cortó el cabello de Yeji hasta de un solo lado. Había sido tan rápido que Jimin apenas había levantado la mano para intervenir cuando los mechones de cabello ya estaban cayendo al suelo.

—Si sales de aquí no me sirves con vida —continuó Taehyung—. Me darás tu lealtad y a cambio te devolveré a tu hermano.

Yeji dirigió una mirada a Changkyun, luego a Jimin, Jungkook, el doctor Hun, Hangyeom y Sehun éste último estaba tan pálido que parecía un fantasma. El silencio se prolongó hasta que finalmente Yeji descendió, colocando una rodilla sobre el suelo, y su mano derecha en puño sobre su corazón agachando la cabeza. Jungkook suspiró derrotado y caminó hasta ponerse a lado de ella e imitó sus movimientos quedando en la misma posición. Jimin los miró incrédulo en tanto Sehun se movía más por instinto que por voluntad y caía de rodillas al suelo también junto con Hangyeom.

—No es cierto... —murmuró Jimin—. ¡No pueden estar hablando en serio! Esto es... Es estúpido, ¡se están inclinando delante de Taehyung!

Changkyun dio un paso hacia Jimin empuñando las katanas. El doctor Hun se colocó en medio de ambos para detener el avance e inevitable encuentro que seguro acabaría con la muerte de Jimin. Changkyun bien podría cortarles la cabeza a ambos, pero no lo hizo solo porque Taehyung levantó una de sus manos y lo detuvo a tiempo.

—Solo tienes dos opciones aquí. Te quedas y me sirves o te vas envuelto en una bolsa de plástico directo a la morgue. Decide —Taehyung levantó su mano derecha extendiendo los cinco dedos. Esperó un momento antes de bajar el primero, el pulgar—. Cinco... Cuatro...

—¡Jimin! —exclamó Jungkook con la mandíbula apretada cuando notó que éste no cedía y Changkyun apartaba del camino al doctor Hun con un empuje agresivo.

—Tres... Dos...

Changkyun meneó la katana en el aire con una sonrisa de oreja a oreja justo en el momento en que Jimin caía al suelo lejos del alcance. Taehyung no sabía si había hecho eso para esquivar el ataque o si lo había hecho para arrodillarse ante él. Por un momento todo fue confuso hasta que Jimin habló de nuevo:

—Este payaso hará que nos maten a todos —advirtió a regañadientes y agachó la cabeza delante de Taehyung.

El castaño sonrió complacido. Changkyun había hecho la misma ceremonia ante él el día anterior. Por un momento le pareció desconcertante, pero al mismo tiempo lo hizo sentir poderoso. No tenía idea de que la mafia tenía ese tipo de cosa tan solemne aunque había leído en algún lado que grupos en Japón ofrecían su lealtad con mucho respeto a su líder.

HOME » NJ•KVHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin