[BORRADOR FALTAS DE ORTOGRAFÍA ]
[+18]
"El destino une a las personas que más se necesitan."
Samanta cree que su verano será como los anteriores, encerrada en su cuarto con todos los problemas que se carga, pero nunca contó que aquel guitarrista fra...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Jerome
Sé perfectamente porque lloró anoche, por esa razón la abracé tan fuerte, quería que sintiera que no había nada que temer, mi linda estrella es valiente.
No puedo apartar los ojos de ella, de su respiración calmada, de sus labios, de sus pecas, es hermosa, no importa si en las mañanas llegamos a parecer un espanta viejas, ella para mi sigue luciendo hermosa.
Tenerla frente a mí y verla dormir me da una paz inigualable, poder tocarla —acaricio con suavidad su hombro. —amanecer con ella. Debo admitir que mi cabeza no está de lo mejor, ahora solo puedo pensar en que esto pudo haberse evitado si ella y yo no nos hubiésemos topado nunca, pero ahora lo pienso y... sólo llega a mi cabeza una interrogante, ¿Cómo viviría sin ella?
Acaricie su mejilla y Summer puso su pequeña mano sobre la mía, entreabre los ojos dejándome ver ese azul como el cielo mientras en sus labios hay una leve sonrisa.
—Mejor tírame una foto... —murmura con voz adormilada.
—Ya lo hice, justo cuando estabas babeando. —sonreí ampliamente.
—¡¡Qué!! —se levantó alarmada causando que la sábana caiga de su pecho, no puede evitar verlas... a ambas —¡no seas idiota anti-fan! —me empuja el pecho y aprovecho y la atraigo hacia mi aprisionándola en mis brazos, ella forcejea e intenta morderme. —¡Jerome! —una carcajada brota de sus labios.
Enredé sus piernas a las mías y la tumbé a mi lado para cubrirla con mi cuerpo, intentó empujarme, pero aprisioné sus manos por encima de su cabeza.
—Quiero desayunar... —susurró mirándome directo a los ojos.
Sonreí de medio lado.
—Yo igual. —bajé mi vista a sus senos. —Joder, podría venerarte y besarte toda la mañana.
—No, No, No —remueve sus manos aprisionadas. —me besaras cuando me cepille los die...
No termina la frase porque la puerta es abierta de golpe.
—¡Mamá!
—¡¿Samanta?!
Gritan ambas alarmadas. Summer me tira a un lado y se cubre. Yo sonrío y levantando mi mano con coquetería.
—Suegrita...
Marina cierra la puerta de golpe y grita desde el otro lado:
—¡Espero hayan usado un condón!
Summer se cubre el rostro con la sábana. Rei en discretas carcajadas por la forma en la que lo dijo.
—¡Si lo hice, no se preocupe!
—¡Idiota! —susurro Summer alarmada tapando mi boca. Sus ojos se abrieron en reproche.
—Bajen a desayunar... —escuche como suspiró. —por favor nada de oler a sexo. —escuche sus pasos alejarse.
