Un verano con Summer © #1 ✔

☘ Capítulo diecinueve ☘

Horas atrás

Jerome

Cuando llegue a mi casa lo menos que esperaba era encontrar a mi ex novia esperándome en la puerta, no quería verla, después de tantas pablaras que deje en claro entre los dos, ¿hubo cosas buenas del pasado?, sí, pero ahora no, nada fue bueno después de un tiempo, las peleas, las heridas hechas entre los dos... es por eso que la ignoro mientras me ve a un lado esperando que le diga algo, cosa que no haré.

La mano de Yvone se posa en mi hombro mientras abro y suelto un largo suspiro con eso, por cómo me acaricia el brazo con su palma hasta dejarla en mi cintura envolviéndome en un abrazo sintiendo su babilla en mi espalda.

—Jerome —pronuncia mi nombre en un tono suave.

—Quiero que te vayas —espeto quitando el agarre que tiene en mi cintura cuando por fin la puerta se abre.

Camino dentro de mi casa de playa y cuando le voy a cerrar la puerta me aparta entrando a las malas para verme en espera que la acepte. Mi paciencia tiene un hijo de puta límite... y creo que se está agotando.

—Solo vine para saber de ti amor...

—Oh ¿enserio? —Cuestiono sarcástico —ya me has visto te puedes ir, —le abro la puerta en la clara señal de que se largue, pero ella solo se acerca para cerrarla en un golpe y después encararme con determinación.

—Solo vine a pedirte perdón, no debí revolver las cosas del pasado, ni mucho menos amenazarte, solo... —se detiene con abrupto consiguiendo que su voz salga entre cortada como si tuviera un nudo en su garganta.

—Lárgate —ignoro su semblante decaído y triste porque sé que todo esto es manipulación.

Como todas las veces... me engañó en la fiesta de fin de año en mis narices como si nada y que pasó... la deje de nuevo, y no habían pasado ni tres horas para que Yvone me llame en una clara amenaza de que se iba a matar... y que no se me olvide el embarazo que perdió.

Cosas raras, porque con ella siempre he usado condón, ya saben a dónde quiero llegar.

—Jerome escúchame... —pide entre lágrimas. Trata de tocarme, pero detengo su mano para que su tacto no llegue a mi mejilla —ella ni siquiera te va a preferir no lo entiendes, ella tiene novio, no te va a mirar yo sí, —se da palmada en el pecho —yo por ti hago lo que sea porque te amo, me necesitas...

—Quien dice que no me elegiría, no digas estupideces, ella no es como tú —le reprocho —ahora vete...

Trato de abrir la puerta, pero ella la cierra de nuevo deteniéndome.

—No seas iluso —musita enojada —ella solo tiene ojos para su novio, ¿crees que cuando te vea en una de tus crisis se quedara?, seguirá mirándote con los mismos ojos, —niega con su cabeza —te vera como una carga, en esos ojos solo serán lastima hacia ti Jerome —me empuja y doy tres pasos hacia tras sin hacer nada —date cuenta...