[BORRADOR FALTAS DE ORTOGRAFÍA ]
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"El destino une a las personas que más se necesitan."
Samanta cree que su verano será como los anteriores, encerrada en su cuarto con todos los problemas que se carga, pero nunca contó que aquel guitarrista fra...
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Summer
—¿El vestido azul? —indago en el número tres...
—Nop. —niega con la cabeza en desagrado.
—¿Enterizo rosa con brillo? —lo extiendo para que lo pueda ver.
—Nop —vuelve a negar hastiada.
—¿Ir desnuda? —pregunto en broma por su actitud.
—Si quieres —se encoje de hombros como si no le importase.
—¡Emmy no ayudas! —grito con los nervios de punta.
Necesito un té de esos que beben lo abuelos para bajarle a las emociones.
—Te dije que te queda hermoso lo que tienes puesto —dice casi rodando los ojos.
—Lo dices porque lo escogiste tú —acuso con mi dedo índice y negando en desaprobación.
—¡Claro que no! – se defiende como si de un tribunal se tratara.
—¿Segura? —levanto una ceja al aire. La conozco, claro que es por eso.
Por cierto hoy Leonard me invitó a una pastelería nueva y la van a inaugurar hoy estoy muy nerviosa, ósea como no, él fue mi primer beso y digamos que después de la pesadilla que viví fue al único chico que deje entrar en mi corazón. Era al único que deje que me tomara de la mano del género masculino.
—Por favor quédate con la falda animal print y el top blanco, —suplica —razones por las cuales debes dejártelos —comienza a enumerar con sus dedos en un tono obvio, ese tono que siempre utiliza al ser de moda o ropa de la temporada —el atuendo 1-la falda tiene un abierto precioso y combina con el top blanco y los tenis bajitos y... si quieres te pones los lentes de sol pequeños. Además, estas nerviosa Summer obvio vas a querer ponerte todo y en tu cabeza te verás mal cuando no es así.
Como odio que me conozca tan bien, caray es que como no sentir que el día te ama y que a la vez te odia, puedo tener el closet lleno de lo que sea y en este caso no encuentro nada que me guste ni siquiera las ropas que más uso y adoro.
Joder... dame fuerzas Dios mío —Suspiro resignada, —ella tiene razón serán los nervios que me tienen como boba enamorada. Él no me gusta.
¿O sí?...
Estúpidas mariposas en mi estómago no dejan de revolotear sin parar, aunque... No sé si es el hambre, pero no, el hambre no te hace sudar las manos, que tus piernas te fallen y que tus labios se extiendan en una sonrisa en pensar en esa persona.
Después de que Emmy me arreglara con lo del maquillaje, solo faltaba una sola cosa...
La autorización por la jefa.
Mi madre.
Bajo las escaleras con la lengua de la nada enredada y que en cualquier momento me daré duro en las escaleras cuando encuentro la cara de mi madre aparentemente enojada, ¡¿cómo carajos se me ocurro hacer los planes sin el permiso?!
