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❛⿻۬˖̥ ͭ; Buenas, Noemys ♡⃕ ᨳˎˊ˗

Ese día pasé la mañana en casa de los Min, después de él momento tenso con Yoongi, a él le llegó una llamada y tuvo que bajar a la calle para reunirse con alguien. 

Me duche aprovechando su salida y volví a ponerme mi uniforme. Pasé un buen rato con Jaehyun en su habitación, él me mostró algunos de sus diseños. El chico ama la moda y diseñar sus propios atuendos. Creo que él y Tae se llevarían bien, si ambos se pusieran a hablar. 

Cuando llegó la hora de la comida, la señora Ahn insistió en que también me quedara a comer. No pude negarme. Me mantuve en silencio, mientras ella hablaba con Jaehyun. Yoongi de igual modo estaba en silencio. 

Cuando terminamos, el chico de tez pálida y yo, salimos de su casa. Subimos ambos en mi coche, pero él conducía. Creo que le gusta llevar las riendas de la situación. 

Pensé que iríamos a mi casa, pero fuimos al club de su padre. Dejó el coche a un lado y me miró atentamente. 

Me quedaré aquí, debo trabajar el resto de la tarde. Me gustaría llevarte a casa, pero ya voy tarde y no quiero más problemas con mi padre. 

Si necesitas dinero, yo puedo encargarme… Puedo ayudaros– Me corto, tapando mi boca con su mano. 

No, no por favor… Rubí, tu padre ya hizo suficientes cosas por nosotros. No puedo pediros más. Ya no es algo de dinero, es orgullo entre vampiros. 

No sabía qué decir. Entiendo que es algo que debe resolver él, yo haría lo mismo en su situación. — ¿Al menos puedo hacerte compañía un rato? No quiero ir a casa aun. – Para ser sincera no quería dejarlo solo y tampoco quería aguantar a Ari hoy. 

¿Quedarte conmigo? ¿En serio? La otra vez no parecías muy cómoda. 

Porque no sabía dónde me metía… ahora ya lo sé. 

El chico suspiró detonando cansancio. No le quedó más remedio que llevarme con él. Me agarré a su brazo al entrar, el me guío directamente a una sala apartada, donde estaban las taquillas y vestuarios de los trabajadores. Además del camerino de las chicas. Estas entraban y salían de él. Muchas con prisa por tener que ir con un cliente y otras por tener que actuar. Y eso que ahora mismo no era la hora punta en el club. 

Tomé asiento en el banquito del medio, mientras miraba a esas mujeres. Ellas trabajan duramente para llevar dinero a su casa y yo simplemente respiro para conseguirlo. Siento que mi vida es un privilegio, pero una injusticia para los demás. Debería esforzarme por ganar las cosas, por mi misma. 

Mi vista se centró en el chico de cabello negro, quien empezó a cambiarse de ropa. El tiempo parecía retroceder mientras se quitaba la camiseta, dejando su torso al descubierto. No podía negar que a mis pensamientos llegaban miles de pensamientos poco impuros. 

¿Rubí? ¿Rubí estás ahí? – preguntó mientras daba un pequeño toque en mi barbilla. 

Salí bruscamente de mis perversos y calurosos pensamientos. Carraspee, mientras me ponía de pie, nerviosa. 

Si, si… Solo estaba pensando. 

¿En mi?

Si… eh no, no. En ti no. – Me dí una palmada mental en toda la frente. Nací siendo estúpida, no puedo remediarlo. 

El me miró achinando sus ojos, como si no me creyera. La verdad es que miento muy mal. Él sonrió negando con la cabeza. 

Toma, cámbiate de ropa. Con el uniforme conseguirás que te confundan con una de las chicas. – me paso una camiseta negra que sacó de su taquilla, era idéntica a la que se acababa de poner el. – Creo que no tengo parte de abajo… Espera aquí. 

𝙱𝚕𝚘𝚘𝚍 𝙽𝚒𝚐𝚑𝚝 » 𝙼.𝚈𝙶 Where stories live. Discover now