𝙱𝚕𝚘𝚘𝚍 𝙽𝚒𝚐𝚑𝚝 » 𝙼.𝚈𝙶

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La mañana siguiente me desperté de buen humor, me di una ducha rápida y me acomodé el uniforme. Hoy tendríamos clase de educación física, no sé qué deporte practicaremos, pero tenía ganas. 

Desayuné con Izan, quien me pidió ayuda para repasar el examen mientras comíamos. Me sorprendió que me pidiera ayuda, después de tantos años sin hacerlo. 

Recuerdo que cuando éramos más pequeños, solíamos hacer los deberes y trabajos juntos. Yo le ayudaba y él conseguía que estudiar fuera más divertido para mi. 

— ¿Hoy irás a casa de Yoongi Hyung? –Preguntó con curiosidad. 

— Si, me quedaré allí seguramente a dormir. 

Agarré una tostada con mermelada y me la llevé directamente a la boca. 

— Vas muy en serio con ese chico ¿no? –Ari sonrió de forma pilla. 

— Él me gusta y espero que él sienta lo mismo. 

Me limpie con una servilleta y me levanté de la mesa. Mi padre ya se había ido y las empleadas limpiaban el desastre que había liado Izan con su experimento de ciencias. Mezcló bicarbonato con un montón de cosas raras y mancho toda la cocina. 

Izan me siguió a pasos rápidos hasta el coche y subió de copiloto. Durante el trayecto no dejó de hablar de Yoongi. Empiezo a creer que está obsesionado con él. Pero todo lo que dice son cosas buenas. 

Me enteré que fue Izan quien llamó primero a Yoongi ayer. Los dos estuvieron hablando antes de que Yoongi me llamara. 

Me hubiera enfadado, pero el hecho de que Izan confíe en Yoongi y se desahogue con él, me deja tranquila. Prefiero eso a que se lo guarde todo o vuelva a confiar en Jungkook. 

Estaba algo nerviosa al ver a Yoongi, no me atrevía a salir del coche a pesar de estar viendo como el chico hablaba con Wonho y con Yugyeom. 

— ¿Por qué lo miras así? 

— Estoy nerviosa por verlo

— ¿Es por lo que hablaron ayer?  

— Más o menos… es diferente. 

Claramente no iba a decirle que tuvimos una videollamada un tanto caliente. Respire profundamente, acomodé mi camisa del uniforme y tenía intención de bajar, pero Izan me agarró agarró brazo. 

— Espera, ¿vas a salir así?

— ¿Así como? 

— Con todos los botones de la camisa abotonados. Es extraño que no acomodes tu escote. ¿Te sientes bien? 

Solté un largo suspiro. No puedo negar que me conoce. 

— No dejo de darle vuelta a lo de ayer. Hoy ya todas las manadas son conscientes de lo que hice. Todos ya deben saberlo en clase. 

— ¿Y eso te importa ahora? Eres Rubí Wolf, levanta la cabeza, abre tu escote y adelante… Eres una alfa, nadie debería menospreciarte por lo que hiciste. No tienen derecho a hacerlo, Rubí. 

Él tenía razón. No podía vivir comiéndome la cabeza por el qué dirán de mí. No sé yo misma, les dejará claro que soy débil.

 Que lo soy, pero ellos no deben saberlo. 

Le regale una gran sonrisa a Izan y lo abracé. Añoraba a mi hermano. Dejó un beso en mi cabeza y bajó del coche. Yo aún no salí, pero gracias a él, Yoongi y los otros dos chicos miraron en mi dirección. Me mire en el espejo y acomode mi escote como me gustaba llevarlo. No era nada exagerado, pero pocas se atrevían a modificar sus uniformes y tener su propia personalidad.