XXXIX

444 39 2
                                    

- Al traidor y bastardo, Jon Nieve, permitisteis que miles de salvajes cruzaran el muro. Habéis traicionado a los vuestros, habéis traicionado al Norte. Invernalia es mío, bastardo. Venid a verme. Vuestro hermano Rickon está en mis mazmorras.- Jon leyó la carta que los Bolton le habían enviado.- Quiero a mi esposa, enviádmela bastado y no os importunaré, ni a vuestras amantes salvajes. No me la deis y entonces iré al Norte y mataré a todos los hombres, mujeres y niños salvajes que vivan bajo vuestra protección. Veréis como los desóllo vivos, veréis... 

- Sigue.- le alentó Sansa. 

- Es más de lo mismo.- respondió Jon negándose a seguir leyendo. 

Sansa le arrebató el pergamino de las manos.- Veréis a mis soldados turnarse para violar a vuestras hermanas, ha llegado a mis oídos que la otra bastarda también está contigo. Veréis a mis perros devorar a vuestro hermanito salvaje, luego os sacaré los ojos de las órbitas y dejaré que mis perros hagan el resto. Venid a verlo. Ramsay Bolton, Señor de Invernalia y Guardian del Norte. 

- Señor de Invernalia y Guardian del Norte.- repitió Eilidh con burla.

- Su padre a muerto, Ramsay lo mató.- dijo Sansa.- Y ahora tiene a Rickon. 

- Eso no lo sabemos.- dijo Jon. 

- ¿Y vamos a arriesgarnos a que sea verdad?- preguntó Eilidh.- Lo poco que he visto de él me vale para saber que no miente, y que no le temblará la mano para matarlo. 

- ¿Cuántos hombres tiene suljército?- preguntó Tormund. 

- Le oí decir que cinco mil cuando hablaba del ataque de Stannis. 

- ¿Cuántos tienes tú?- preguntó Jon. 

- Que puedan marchar, dos mil.- respondió el pelirrojo.- El resto son niños y ancianos. 

- Eres hijo del último Guardian del Norte verdadero.- le dijo Sansa.- Las familias del norte son leales, lucharán por ti si se lo pides.- se inclinó sobre la mesa para tomar su mano.- Un monstruo tiene nuestro hogar y a nuestro hermano, debemos volver a Invernalia y rescatar a ambos. 

Eilidh observó la escena con una mirada amarga, no deseaba el poder o al menos eso creía. Pero ella había luchado por el Norte mientras Sansa era prisionera en Desembarco del Rey y Jon se desentendía en la Guardia la Noche. Había luchado junto a los norteños a los que ahora querían pedir ayuda por el rey en el Norte. Pero aún así parecía que nada de lo que había hecho tenía importancia, solo la veían como una mujer. Preferían seguir a Jon, que a ella, solo porque es un hombre. A pesar de que sin saberlo la habían seguido al seguir a Robb. 

No importaba lo que luchase o lo que hiciera, siempre la verían como un par de tetas por debajo de los hombres. Los hombres llevaban gobernando desde hace milenios, y no les había ido tan bien. 


No tardaron en comenzar a preparar una estrategia para ir contra los Bolton y recuperar Invernalia. 

- No podemos defender el Norte de los caminantes y el Sur de los Bolton.- dijo Jon mirando el gran mapa.- Si queremos sobrevivir necesitamos Invernalia, y para tomar Invernalia necesitamos más hombres. 

- A parte de los Stark y los Bolton, las casas más poderosas del Norte son la Amber, la Karstark y la Manderly.- ser Davos separó las piezas de dichas casas.- Los Amber y los Karstark ya se han alineado con los Bolton, así que por ahí no vamos bien. 

- Los Amber entregaron a Rickon al enemigo, que los cuelguen.- dijo Sansa.- Pero los Karstark se adhirieron con Ramsay sin saber que tenían otra opción. 

- No creo que quieren unirse a nosotros, saben que Robb decapitó a su padre.- negó Eilidh

- Padre siempre decía que los norteños son más leales, más desconfiados con los extranjeros. 

- Lo sé, Sansa.- suspiró Eilid.- Pero, cuántos se han levantado contra los Bolton cuando nos traicionaron. Estoy segura de que todos guardan su lealtad a padre, pero nadie quiere ver a su familia desollada, si queremos que luchen con nosotros, debemos darles esperanzas de que podemos ganar. 

- Sabemos que hay más de tres casas en el Norte, Glover, Mormont, Hornwood.- Jon enumeró.- Y dos docenas más, juntas igualan a las otras. Podemos empezar por poco y crecer. 

- El Norte recuerda.- dijo Sansa.- Recuerda el apellido Stark, la gente aún lo arriesgará todo por él, desde Puertoblanco hasta la puerta de Ramsay. 

- No lo dudo.- dijo ser Davos.- Pero Jon no se apellida Stark. 

- No, pero yo sí.- respondió la pelirroja.- Y Jon es tan hijo de Ned Stark como Ramsay lo es de Roose Bolton. Y también están los Tully, no son norteños pero nos respaldaran contra los Bolton sin cuestionárselo. 

No lo había mostrado, pero que Sansa no le hubiese nombrado le había dolido. Ella había luchado por el norte más que ellos dos y ahora era dejada de lado, por bastarda y por mujer. 

- No sabía que los Tully aún tenían ejército.- dijo Davos. 

- Mi tío, el Pez Negro, renovó su ejército y reconquisto Aguasdulces. 

- ¿Cómo lo sabes?- preguntó Eilidh. 

- Ramsay recibió un cuervo antes de escapar de Invernalia.- le respondió la pelirroja.

- Eso es bueno.- concluyó ser Davos.- El Pez Negro es una leyenda, su apoyo sería importantísimo. Stark, Tully, unas cuantas casas más... casi parece que tenemos las de ganar.

Ese mismo día partieron del Castillo Negro en busca de casas aliadas para hacer frente a los Bolton. Sansa llevaba un precioso vestido en el que ella misma había bordado un lobo, también le había dado una capa a Jon con el blasón de la familia, tal y como solía llevarla su padre. Eilidh no recibió nada, pero sujeto a su vestido llevaba orgullosa el broche que había pertenecido a Robb. 

Ahora dos lobos la seguían pero aún así nunca se había sentida más pequeña. 

Nieve en verano (GoT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora