59. No soy quien creo que soy...

4 1 0
                                    

Lily

19 de Junio, 8:31 AM

Thena está rara

Desde hace unos días no para de hablar por teléfono, está nerviosa, pálida, incluso delgada. No he visto a Kay ni a Karl en ninguna parte, fui a su departamento y no quiso que pasara.

Así que, acudí a las únicas personas que por ahora, también podría interesarles esto.

-¿Que Thena que?- Pregunta Christine viendo su teléfono con atención. Carlos siquiera creo que me haya escuchado hablarles sobre la actitud de Thena.

Puedo entender que estén preocupados por lo de la empresa, y que seguramente fue un atentado para ellos, pero Thena está actuando raro, y no creo que sea coincidencia que empiece a comportarse así justo después del atentado.

Ella sabe algo, y alguien está detrás de ella.

-Si Thena sabe algo, debemos sacarselo- Refuto haciendo que ambos empiecen a mirarlo.

-¿Que puede saber Thena que nosotros no?, por dios Lily, cada día estás más paranoica- Responde Carlos colocándose uno de sus Airpods.

-Se que quieres ayudarnos, pero lanzando acusaciones basadas en comportamientos raros no estás haciendo nada, Lily- Agrega Christine apoyando a su ahora marido.

Suelto un suspiro con coraje pensando en alguna forma de sacarle lo que sea que tenga dentro a Thena, no tanto por la información, si no, que quiero echarles en cara que soy de más ayuda de lo que ellos alguna vez pensaron.

-Pues van a ver que tenía razón- Refuto recogiendo las cosas que deje en la encimera.

-¿A dónde vas?- Pregunta Carlos llamando a otro de seguridad, ya incluso tengo guardaespaldas.

Estos dos se están preocupando demasiado por Thena y por mi como para no sentir nada por nosotras.

La vida de los amores no correspondidos, ¿O eran imposibles?.

-Voy a casa de Thena, a obligarla a comer si es necesario- Aviso caminando hacia la puerta.

-Cuidado en las calles- Habla un poco alto Christine despidiéndose, elevo mi pulgar más arriba de mi cabeza para que lo vean antes de cerrar la puerta.

En el camino al auto, mi compañero se sube en el copiloto cuando me rehuso a darle las llaves. Tengo que idear la forma de que Thena diga lo que tiene escondido. Para el estado en que está, debe ser algo muy grave, y me preocupa que tenga que ver con las dos personas que se encuentran en el departamento ahora, y que son los más grandes magnates de la ciudad.

Me estaciono fuera de su casa, dejando el auto cerca de la salida por alguna razón no aparente.

-Quedate aquí, si tenemos que salir pitando, seguro me escucharás gritar- Aviso y muestra un gesto gracioso ligero. Toco la puerta cuando subo, y afortunadamente, abre la puerta por completo mi querida amiga -Hola, pequeña desaparecida- Saludo apenas me mira. Por un segundo demostró el alivio de verme, pero no duró lo suficiente, ya que inmediatamente quiso cerrar la puerta en mi cara.

Aún así, no le dejaré fácil lo de evitarme. Coloco mi pie antes de que cierre la puerta, y aunque me dolió, conseguí mi objetivo de lograr entrar.

4 de ReinasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora