28.-La verdad

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Samuel llego al cuarto agotado de tanto pensar, por más que quería hacer que Andrea se sintiera bien a su lado no lograba hacerlo, ella lo desesperaba en un segundo y sus celos lo hacían perder la razón, se sentía mal por como la había tratado y los insultos que le dijo pero también estaba enojado con ella, tenía muchas dudas y eso lo mataba.

Sabía que tenía que dormirse en el sofá, pero...era su luna de miel y no quería pasarla lejos de Andrea, quería estar a su lado cada minuto, aunque se la pasaran peleando por todo.

Samuel: Estoy loco.-susurro frotándose la cara con las manos y se levantó del sofá para encaminarse a la habitación de Andrea, entrando y encontrándola frente a la ventana, con una taza de café y un libro.

Cuando entro ella levanto la vista y lo miro fijamente, sin embargo no expreso ninguna emoción, ni siquiera enojo o fastidio al verlo, después de mirarlo por unos segundos, volvió su vista al libro y tomo un sorbo de café.

Samuel: Necesitamos hablar.-dijo cerrando la puerta tras él y Andrea se alzó de hombros, sin siquiera levantar la vista.

Andrea: ¿No veo de qué? A menos claro que se te acaben de ocurrir nuevos insultos. Y si es así, solo dilos y lárgate de la habitación.

Samuel: Esta también es mi habitación.

Andrea: Muy bien, entonces por favor quédese en su habitación amado esposo que la que se va soy yo.-dijo levantándose pero Samuel la tomo de la cintura impidiéndole el paso.

Samuel: Por favor, quiero arreglar las cosas.-dijo mirándola a los ojos y ella hizo una mueca.

Andrea: ¿Para qué? ¿Para qué no pasemos la noche enojados?-pregunto con burla.-Eso podrán hacerlo las parejas, pero te recuerdo que nosotros no lo somos, no de verdad.

Samuel: Es enserio.

Andrea: Ok, habla entonces, ¿Qué me quieres decir?

Samuel: Que me perdones, me porte muy mal, te dije cosas que posiblemente te hirieron y no era mi intensión, es solo que me molesta como me hablas y como me retas en algunas ocasiones, también me molesta que siempre nombres a Paul.-dijo y ella sonrió.

Andrea: ¿Celoso?

Samuel: Digamos que me pongo de la misma manera a cómo te pones cuando hablo de Karen.-dijo y ella borro su sonrisa.-Si eso es estar celoso, si estoy celoso.

Andrea: Por supuesto que no, solo me cae mal.

Samuel: Bueno, a mí también me cae mal Paul.-dijo con vos tranquila y ella lo miro con recelo.

Andrea: Esta bien. Perdonado ¿Algo más?

Samuel: No, pero no estaría nada mal que tú también te disculpes.

Andrea: Bien, me disculpo, pero no diré nada de cursilerías ya que yo si quería herirte, y tu comenzaste primero.-dijo bebiendo de su taza y Samuel suspiro.

Samuel: ¿Porque siempre te tienes que comportar así? Como si nada te importara, como si no tuvieras sentimientos, y se perfectamente que los tienes porque eres humana, solo que los quieres ocultar, ¿Pero de que te sirve eso?

Andrea: Me importan cosas, tengo sentimientos y por supuesto tengo objetivos que quiero cumplir, pero sabes cuál es la diferencia, tu no me importas, el negocio que tengo contigo si, ese es el punto.

Samuel: ¡Eres la mujer más interesada que he conocido en mi vida!-grito.

Andrea: ¡Ay vamos de nuevo! Perfecto, insúltame, anda, llámame perra, zorra, desgraciada, ruin, infeliz, maldita, todo lo que tú quieras, pero después no regreses a querer disculparte, me escuchaste.-dijo enojada y el la miro serio.

Samuel: Lo mejor será que me vaya, contigo las cosas nunca son como las imagino.-dijo algo defraudado y salió de la habitación.

Andrea: Lo mismo digo.-susurro cuando el salió y se dio la vuelta para sujetar de nuevo su libro y abrirlo, comenzando a leer...

Al día siguiente ambos estaban en la recepción esperando que el autobús que les daría el recorrido llegara no solo por ellos sino por algunos más que estaban en ese mismo hotel, Andrea miraba a lo lejos como Samuel reía y conversaba muy feliz con Julieth, pero aunque le hirviera la sangre ya no haría nada, demasiados ridículos había hecho ya, y no haría otro más, no se pelearía por Samuel.

Samuel por su parte no dejara de mirar a Andrea cada vez que ella se descuidaba, ni siquiera escuchaba bien lo que Julieth le decía, pero no dejaba de verla, también sabía que ella lo miraba a él, pero fingía no verla cada vez que ella volteaba.

Julieth: Eres muy divertido Samuel.-dijo sonriendo y acariciando su mejilla.-Me alegra que aún no hayas perdido el toque.

Samuel: ¿De verdad? De lo único que he hablado es de mi esposa y negocios.

Julieth: Y lo haces de una forma que yo estuviera encantada de ser tu esposa.-dijo y él sonrió algo decepcionado. "Ojala Andrea pensara así"-Tienes problemas con esa mujer verdad?

Samuel: No.

Julieth: No me mientas, sé muy bien que sí. Por la forma en cómo se miran, como se hablan...no parecen pareja enamorada. Y bueno, ella se ve que es una...como podría decirlo, fiera.

Samuel: Algo así. Pero es más especial de lo que parece. Por lo menos para mí.

Julieth: Bueno, igual aquí siempre tendrás a una amiga, sabes había pensado en ir a tu pueblo, dicen que es muy lindo y me gustaría conocerlo.-dijo y él sonrió.

Samuel: Pues cuando te animes, tienes un lugar en mi casa.

Julieth: Gracias...

Andrea: Disculpen por interrumpir tan encantadora conversación, pero por si no se han dado cuenta el auto ya llego y quiero irme ya Samuel.

Samuel: Claro, nos vemos dentro Julieth.-dijo sonriendo y tomo la mano de Andrea.-Despídete Andrea.

Andrea: No me dices lo que tengo que hacer.-dijo seria y comenzó a adelantarse.

Samuel: Lo lamento.-dijo apenado y comenzó a alcanzarla.-No tienes por qué ser tan grosera, en que nosotros tengamos problemas no te da derecho de desquitarte con mis amigos.

Andrea: Ay...¿y ella es tu amiga? Dime donde te fuiste anoche cuando nos peleamos.

Samuel: Salí a caminar.

Andrea: Ay mira qué lindo...a caminar.

Samuel: Escucha ella no es nada mío.-dijo tomándola del brazo y Andrea lo miro seria.-Y estas exagerando más de lo que deberías. A ella solo la quiero como amiga.

Andrea: Ay por favor...mira déjame en paz quieres, ya no quiero seguir hablando del tema.-dijo y siguió caminando.

Samuel: Mira, siempre has terminado tú las conversaciones y estoy harto de eso. No sé qué se te ha metido en la cabeza o si piensas que soy igual a ti, pero no tengo nada con Julieth y jamás lo tendría. En primer lugar porque ella no se merece que la ocupe como una aventura, y en segundo porque...porque tengo principios. Así que deja de suponer cosas.-dijo serio y esta vez fue Andrea la que lo tomo del brazo cuando el se disponía a irse.

Andrea: ¡Eres el mentiroso más cínico que he conocido en mi vida! Por lo menos yo no miento en cambio tú, eres capaz de mirarme a la cara y decirme que no tuviste nada que ver con esa mujer cuando yo los vi!-grito con furia mientras todos la miraban.

Samuel: ¿De qué me estás hablando?-pregunto frunciendo el ceño.

Andrea: ¡Que te fui a buscar Samuel!-grito con dolor mientras recordaba lo que sintió hace más de tres años.-¡Como una estúpida enamorada fui a buscarte, deseaba como tonta enamorada darte una sorpresa y la sorpresa me la lleve yo cuando te encontré besándote con ella...!

CAMINOS UNIDOSWhere stories live. Discover now