Capítulo 53 | Parte 1.

60K 4K 2.1K
                                    

Capítulo 53

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Capítulo 53.

Me quedé sin palabras. Jamás hubiera pensado en eso. Es cierto que nunca vi a sus padres cuando lo cuidaban en la casa de Jesse, pero entonces, ¿cómo llegó a ellos?

—Andy...

— Conocí a Andrés a través de Marcella Milán, mi madre de crianza. - Me interrumpió, pero él tenía la mirada perdida en alguna parte de esta habitación. — Ella era maestra de música, y en aquel entonces, iba impartir clases al hogar de niños dónde yo vivía. — Suspiró con pesadez y sé que realmente le cuesta decírmelo. — Yo tenía siete años cuando la conocí. Ella era una mujer soltera con un trabajo estable y siempre quiso tener hijos biológicos, pero no pudo. Me adoptó cuando estaba a punto de cumplir los ocho años. Ya debes saber que en los hogares de niños es... cuestión de suerte el encontrar una familia estable. — Me apartó de sus piernas y se levantó con fastidio, sin mirarme a los ojos. — Marcella luchó y pasó mucho trabajo para que yo pudiera irme con ella. ¿Y sabes por qué? Porque no era elegible para una posible opción de adopción por ser una mujer sola. — Tomó una bocanada de aire al continuar. — Después le aprobaron un permiso temporal para observar cómo iban las cosas. Era un niño, pero sentí y vi cada inquietud. — Se giró y me miró fijamente. — Mi madre sufrió mucho en todo el proceso.

—Andy, yo...

—Después Marcella Milán conoció a Andrés cuando él realizaba su residencia en un pequeño hospital de esta región.

Tragué hondo y él se dio cuenta, pero prosiguió:

—Todo eso mientras yo vivía con ella gracias al permiso temporal.

Caminó hacia la mesa de noche que estaba junto mi cama y observó una fotografía que me había hecho con mis padres y mi hermano el año que había entrado a la escuela de medicina.

—Y supongo que más adelante se casaron y te adoptaron oficialmente —asumí con timidez. Mis manos estaban sudando por los nervios.

Aunque me daba la espalda, me di cuenta de que asintió en silencio mientras continuaba observando la fotografía con mi familia. De repente, me sentí incómoda, porque, irónicamente, no quería incomodarlo con eso ni con nada que le hiciera sentir mal.

—¿Viviste en un hogar de niños desde que naciste?

Asiente y noté que comenzó a ponerse más nervioso de lo que estaba. Maldita sea, esto me estaba costando demasiado hasta a mí. ¿Por qué soy tan estúpida y le sigo preguntando?

«Porque quería saber todo de él y porque lo amaba», me respondí a mí misma.

—Mi vida no ha sido como la tuya, Aly —se sentó en el borde de la cama—. Sé asumirlo y acepto que aquello me tocó a mí vivirlo. Es solo que no me gusta hablar de eso.

— ¿Sabes de tus verdaderos padres? — La pregunta se me escapó antes de que pudiera pensarlo.

"Erro, Nere. Grave error."

MCP | El Internado ©️ (¡Disponible en físico!) ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora