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[ 💜 Magnus ]

Llegó el tan esperado día de la boda.

Todos los invitados, incluyendo a Alexander se encontraban en la Iglesia esperando mi gran entrada.

Yo aún estaba en la limusina que habían pagado para nosotros, pensando.

–¿Qué pasa, pequeño? –me pregunto mi padre, quien estaba conmigo.

–Estoy nervioso. Tengo apenas 21 años y no me siento preparado para dar este paso –admití.

–Nadie en la vida se prepara para dar este tipo de pasos. Sólo escucha tu corazón y haz lo que te haga feliz.

–Alexander me hace feliz –mentí.

Odio hacerlo más si se trata de las personas que amo.

–Ahí esta la respuesta.

Después de un gran abrazo de padre e hijo. Los dos entramos a la Iglesia con una música de fondo haciendo más dramática la situación.

En el momento que llegamos al altar, mi papá le hablo seriamente a Alexander: –El día de hoy dejo en tus manos, lo más valioso de mi vida, cuídalo y cumple lo que me prometiste –dijo, brindándole mi mano.

–Lo haré –tomo mi mano y ambos volteamos a ver al padre, quien se encargaría de unirnos en este falso matrimonio.

[ 💛 Alexander ]

Cuando el padre terminó de dar su discurso, llego la hora de decir los votos. Estoy seguro que Magnus se había preparado, pero yo no lo hice, yo pensé que nos saltaríamos este momento.

Lo bueno es que nadie sabía que no me había aprendido lo que debía de decir, por lo cual podía inventar cualquier cosa.

–Prometo ayudarte, amar la vida a tu lado, tratarte siempre con ternura y tener la paciencia que se requiere. Hablar cuando sea necesario y a compartir el silencio cuando no. Prometo vivir en la calidez de tu corazón que siempre será mi hogar –dijo Magnus.

No sabía que decir. Las palabras de Magnus fueron dulces y yo sólo quería decir; Prometo alimentarte. O algo así.

Afortunadamente y agradeciéndole nuevamente a mi hermana, recordé parte de una película, donde los personajes se casan, y el protagonista dice unas lindas palabras en sus votos, Isabelle lo repetía una y otra vez, llegando al punto que hasta yo me lo aprendí.

–Prometo amarte apasionadamente, en todas las formas posibles, ahora y para siempre, prometo nunca olvidar que este es un amor para toda la vida. Saber siempre que, en lo más profundo de mi alma, no importa qué nos pueda separar, siempre nos volveremos a encontrar el uno al otro. Estamos hechos para estar juntos. El día de hoy juro que nada de eso lo podrán cambiar –hice una perfecta imitación al protagonista de aquella película.

Por un breve momento pude ver algo de brillo en los ojos de Magnus, pero también confusión, para después ver nuevamente el rostro serio de este.

–¿Alexander Gideon Lightwood acepta por esposo a Magnus Bane para amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe? –hablo el padre.

–Acepto.

–¿Magnus Bane acepta por esposo a Alexander Gideon Lightwood para amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe?

–Acepto.

–De esa manera. Los declaro maridos – varias risas se escucharon en la Iglesia incluyendo la mía y la de Magnus –. Pueden besarse.

Me incline y junte mis labios con los de Magnus en un pequeño y delicado beso, que no duró más de cinco segundos.

Gritos y aplausos de los presentes inundaron el lugar, mientras caminábamos fuera de la Iglesia.

Ambos nos subimos a la limusina, para dirigirnos al lugar donde se haría la fiesta.

[...]

alguien como tú ¡! malec [TERMINADA]Where stories live. Discover now