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[ 💜 Magnus ]

Salí del trabajo más tarde de lo normal. Mi trabajador tuvo un problema familiar y tuvo que irse antes, así que me quedé a cerrar la librería. Imasu se veía preocupado, parecía un asunto delicado, por eso lo convencí de llevarse mi camioneta para que llegará más rápido a su hogar, fue complicado, pero se logró.

Ahora sin vehículo, mi única opción es caminar.

La casa no queda a más de una hora, no será tan largo el transcurso, además, camino como si alguien me viniera persiguiendo.

Llegaré rápido.

Quería escuchar algo de música, pero a estas horas de la noche es mejor estar alerta a cualquier sonido. Las calles no están vacías, aún hay personas en movimiento, sin embargo; nunca está de más ser precavido.

En medio de mi caminata, escuche algo lamentarse, venía directo de un callejón totalmente oscuro.

Le tengo miedo a pocas cosas, y suelo ser una persona curiosa, desafortunadamente, ambas cosas nunca combinan.

Detuve mi caminar y un tanto inseguro me acerqué al lugar: –¿Hay alguien ahí? –pregunté cauteloso, pero nadie contestó.

El llanto resonó nuevamente, reconocí éste como el de un animal, sin más titubeó me adentré al callejón y empecé a buscar con la lámpara de mi celular.

Después de unos minutos, encontré un pequeño cachorro completamente sucio que lloraba mientras temblaba.

–Hola amiguito –trate de acercarme, pero se alejó. –Ven, te llevaré a una veterinaria, no puedes quedarte ahí.

Intente más de ocho veces agarrarlo.
Afortunadamente la última fue la vencida.

Con el cachorro en mis brazos, me percaté de lo noche que era y que ninguna veterinaria estaría abierta a esta hora.

Así que no puedo dejarlo en una, y los albergues que conozco quedan demasiado lejos como para ir a pie, y definitivamente no pienso dejarlo aquí, le puede suceder algo, pero tampoco puedo llevarlo a casa conmigo.

Alexander odia los animales. Isabelle le guarda algo de rencor porque nunca en su infancia tuvieron una mascota.

Dejarlo con mi mejor amiga solo aseguraría la muerte de su novio que es alérgico a los perros... ¿o eran gatos? No sé, pero es alérgico a algo y me cae bien, no quiero que muera. Y sin duda no podía llevarlo con mis padres, a mi gato no le gustará un nuevo integrante.

Después de pensarlo y descartar demasiadas ideas, no tuve otra opción más que llevarlo conmigo.

Afortunadamente es tan pequeño que logró caber en la bolsa de mi sudadera. Camine un poco más confíado por las calles al no sentirme tan solo.

Cuando llegué a casa, llamé a Alec unas cuantas veces. En el momento que caí en cuenta que no había nadie, metí al cachorro a bañar, le di algo de comer y lo escondí en una de las habitaciones vacías. Terminando de eso, me preparé algo de comer y me senté a ver televisión. No tenía nada de sueño, así que tal vez si veo algo aburrido me agarré un poco y me pueda ir a dormir.

[ 💛 Alexander ]

Fue un día de mucho trabajo, tuve que despedir algunas personas que no estaban dando un beneficio directo a  la empresa, arreglar documentos, firmar contratos y demás.

alguien como tú ¡! malec [TERMINADA]Where stories live. Discover now