Tus acordes en mi guitarra

Epílogo

[Antes de que empecéis a leer, quiero deciros quienes son los que vais a leer ahora y que en la realidad están por aquí:

- Antonio: Pedro
- Ana: AitedaC
- Carmen (prima de Luis): Carmen_1122
- Julia (hija de Carmen): Julia, de AitedaC
- Jimena: escritor_a07
- Mateo y su hermana pequeña: personajes de escritor_a07
-Ann: pssaao  también conocida como Andri
- Alba y Lía: hermanas de Ann (aquí y en la realidad)
- Sergio: Sergio, también conocido como el mejor cuñi
- Lara: LiaJ1500
- Nuria: namart_
- Nerea: nerea_7058
- Manuela (sobrina de María): Muble1
- Amelia: alresss
- Ainara: anaiii94
- Sabela: belusld

Feliz cumple Pedro, eres el mejor abuelo adoptivo que podría tener 🥳💘

¡Disfrutad!✨]

Quince años después todo sigue igual, y a la vez todo tan distinto.

Eliette se mira con una sonrisa en el espejo mientras se peina su oscuro y largo pelo castaño que a cada zona más baja tiende a verse más anaranjado. Piensa en que hoy no es un día cualquiera, hoy es un día especial. Su madre grita desde el salón a la vez que se coloca uno de sus cortos mechones de pelo con cuidado de no estropear el maquillaje que se ha hecho para verse guapa ella misma, y ese detalle hace que sonría al darse cuenta del gran progreso que ha tenido. Y a mí, que lo veo desde fuera, me invade una especie de deja vu, porque al final, todo el mundo vuelve a su punto de partida, la única diferencia es cuánto ha recorrido cada uno al llegar a la meta.

Ambas salen agarradas de la mano y durante el trayecto en coche se limitan a darlo todo con las canciones que se reproducen en la radio disfrutando de ese momento madre e hija que siempre han agradecido tener. Cuando llegan hay una cola que rodea todo el Teatro del Liceu, incluso mucho más, y no pueden evitar sonreír ante tal hecho. Roi, Miriam, y los a no pequeños Olivia y Pablo junto con Ana, Amaia, Emma y Abril, la novia de esta última, elevan los brazos efusivamente consiguiendo que, menos Aitana y Eli, todo el mundo se centre en el espectáculo que están montando.

Cuando ya han entrado utilizando sus pases especiales encuentran a Jimena que regaña a su hijo porque comiendo se ha manchado la sudadera y, evidentemente, no se puede cambiar. Mateo, con el pasotismo de la edad le dice a su padre que haga que su mujer se relaje porque no sabe si la aguantará mucho más, sin embargo, la pequeña de la familia que todavía no ha entrado en la complicada época de la adolescencia les hace fijar la vista al grupo que entran corriendo para abrazarse entre todos.

Poco tiempo es el que pasa hasta que en la sala entran María con sus dos hijas y Mariana, la prima de las dos chicas que ya casi rozan los treinta, junto con Carmen y su hija Julia, que recientemente ha abierto con su novia Sabela un pequeño lugar en Galicia donde los niños en peligro de exclusión social pueden pasar allí lo que les resta de día después de la escuela y donde, intentan, que los problemas sean menores.