Pedacitos 4.1

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Ella pedía algo, no imposible pero si riesgoso, para mí. Si Sasha se llegase a enterar seguro y me mata, igualmente ya estaba sobre Marcy besándola desesperadamente.

“Anne por favor más” suplicó cuando le di chance de respirar

Aun estábamos en la entrada de mi casa y eso no era bueno para ambas, con tantos vecinos chismosos quien sabe que cuentos inventan luego. Así que mejor arrastré a Marcy dentro sin separarme de sus labios y cerré la puerta a como pude.

“Marcy si que estas caliente” le dije ya en la seguridad de mi casa “¿segura que quieres continuar con esto?” aun si estaba ardiendo y tenia una dolorosa erección en mis pantalones, yo tenia que estar segura de que hacíamos lo correcto

“Anne amor…” ella tomó mi mano derecha y sin previo aviso la llevo debajo de su falda “estoy húmeda Anne, quiero aparearme” no tenia que llegar a su intimidad para sentir su humedad ya que note que sus piernas estaban húmedas y pegajosas “vamos, culéame, hazme tuya, rómpeme, ponme en cuatro y azótame, hazme lo que quieras pero por favor aparéate conmigo Anne!”

“Marcy yo…” maldición estaba caliente “no estoy tan segura”

Pero mi desesperada compañera no me respondería normalmente y a prisa me empezó a despojar de mis prendas. Mas su objetivo era claro y yo tenía que tener presente que solo era el alivio temporal de mi amiga y que no debía hacerme ilusiones. Marcy se arrodilló frente a mi allí en medio de la sala y bajando mis pantalones descubrió mi precioso.

Sus ojos brillaron con deseo y sus delicadas manos me acariciaron por sobre mi ropa interior “Esta dura y caliente” dijo mientras arrastró mi ropa interior por mis piernas “la quiero Anne”

Acaricié su melena y ella me dio un beso en la punta, suspire por el contacto repentino a mi sensible compañero, ella lo tomó con sus suaves manos y acarició recorriendo toda mi longitud “Marcy eso se siente bien” dije, ella me miro y una sonrisa adorno su linda carita sonrojada, luego se inclino un poco y sin dejar de mirarme abrió sus labios y me tomó en su boca.

Cerré los ojos llevada por la sensación electrizante de sus labios y su lengua juguetona, su boca húmeda me succionaba casi que no me importaba si explotaba en su linda boquita y le daba de mi lechita. Mis gemidos aumentaron mientras la cabeza de Marcy se balanceaba y devoraba mis poderosísimos 20 centímetros, en ese punto no soporte mas y tomándola de la cabeza comencé a mover mis caderas penetrando su garganta.

“aah hah Marcy Marcy aha sii” maldita sea Sasha por ser una perra envidiosa y quedarse a Marcy para ella sola “Marcy estoy a punto aa”

¡Feliz Navidad Anne!Where stories live. Discover now