Intermedio 2.5

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Todo se sentía tan vacío a su alrededor, todo era tranquilo pero inquietante.

En verdad resultaba difícil pensar que podría estar donde quiera dentro de la casa sin que alguien estuviera tocandole el trasero, era bueno o ¿malo? No estar al pendiente de cada esquina mientras Marcy Wu la penetra por atrás sin consideración. Vaya dilema el que se plantea Anne que suspira por los recuerdos de unos labios salbajes devorando los suyos mientras manos atrvidas le arrancan la ropa y la bañan con encensia pecaminosa.

"¿hey amor estas allí?" Sasha chasquea los dedos frente a su esposa que parece no estar prestando atención a la película que se reproducía en el televisor.

"ah si lo siento, estoy algo cansada. Eso es todo" se excusó con una sonrisa media que delataba su pesar.

Sasha no estaba para replicar, podía notar en los ojos cansados de Anne que decía la verdad. Aunque le estraña siendo la morena quién aconsejó ver una película antes de ir a la cama, por el otro lado Sasha no estaba segura ya que quería estar en la cama con su esposa y hacerle el amor como en los viejos tiempos, ya que siente que últimamente el horario laboral está colocando un muro entre ellas y que no las deja disfrutar de la compañía mutua.

"no te preocupes cariño" Sasha le sonrió y acercándose le robo un rapido beso "¿quieres ir a dormir?"

Anne asintió volviendo a perderse en sus fantasías sexuales con su amante, tanto que no notó que Sasha se preparó para cargarla y llevarla a la cama "¡hey Sash! ¿Que haces?" dijo luego de verse levantada al estilo princesa por los fuertes brazos de la rubia.

"te veo cansada mi amor, asi que pensé en ahorrarte el disgusto de subir las escaleras" le respondió mientras comenzó a andar con la morena en brazos.

Anne quería rechistar pero noto un brillo particular en los ojos de Sasha, provocándole un desplome de emociones que un día lejano sintió. En ese momento sostedida por los fuertes brazos de su esposa recuerda que hubo un tiempo en el que sólo existía Sasha en su corazon.

"hemos aquí" La rubia pateó la puerta y adentrándose hasta la cama depósito a la mujer sobre esta de forma delicada "aquí mi amor" dijo alejando sus manos pero rozando un momento la mejilla de Anne.

"Sash..."

Sasha se alejó de la cama y siguió un camino hasta su tocador, allí se despoja de su ropa quedando en ropa interior. Anne la mira asombrada, aunque de espalda, queda fascinada con lo que sus ojos ven. Es como la primera vez, ¿que sucede con ella? Lo hacen de vez en cuando, (aunque últimamente Marcy se ha encargado de sus necesidades) pero ver a la rubia así, hace que la nota de formas distintas.

"¿ves algo que te gusta?" Anne se asustó, Sasha había notado que se había quedado embobada viéndole el trasero

"jaja bueno yo..." balbuceaba como una adolescente enamorada, una que nerviosa sabe lo que hará pero espera que sea lo menos doloroso posible

"estaba pensando en ponerme la bata de dormir pero si quieres..." Sasha gira todo su cuerpo y lo primero que Anne ve es sus ojos azules, aquellos mares ya nonparecen calmados pues una tormenra los azota "puedo pasar la noche en ropa interior. A menos que tengas una segerencia"

"jeje..." ve esos labios que la han besado muchas veces incluso sólo minutos atras, pero verlos ahora le hacen desearlos cada vez más "¿tu quieres?" pregunta confundida. Confundida por cómo no ha notado antes que Sasha maneja un buen par de pechos que esconde en ese sosten púrpura.

"la verdad ai, hace un poco de calor esta noche ¿no crees?" Sasha se acerca balanceando sus caderas. Anne baja mas la mirada y su vista salta maravillada del enorme bulto que se forma entre las piernas de Sash, allí solo una fina tela oculta el poder de hacerle perder la cabeza.

"se ve grande" dice ya sin rodeos sintiendo como sus bragas se humedecen y ni la fricción de sus piernas pueden contenerla.

Sasha se rie por sus palabras, aunque rara vez la escucha decir algo asi. Sin embargo no le dio importancia, no vale pensar cuando a tu esposa parece  querer comerte y eso que hace rato parecía querer sólo dormir.

¡Feliz Navidad Anne!Where stories live. Discover now