Zweiunddreißig: Esto se va a descontrolar.

3.3K 305 117
                                    

Capítulo dedicado a angelie_esther1

Ops! Esta imagem não segue nossas diretrizes de conteúdo. Para continuar a publicação, tente removê-la ou carregar outra.

Capítulo dedicado a angelie_esther1. Mil gracias por el cariño a la novela. Me hizo mucha gracia lo de "presente, presidenta" JAJAJAJ. Muchas gracias por leer, votar y comentar de vez en cuando, ¡amo todo el amorcito que dejáis en la historia! Espero que lo disfrutes♥.

━━━━━━━━※━━━━━━━━

Zweiunddreißig: Esto se va a descontrolar.

2 de junio, 2020.

La gente tiende a pensar que hablar es fácil, que solo es emitir palabras y dejar que el receptor las acepte, digiera y comprenda.

No opino lo mismo.

Ni siquiera cuando se trata de un mensaje escrito.

Quiero decir, ¿cómo le planteas a una persona que cree haber hecho todo lo posible por hacer bien las cosas que la ha cagado muchísimo? A pesar de que mi relación con Jhon cada día va a mejor (si ignoramos los altibajos de hija-de-diciesiete-años-educada-en-España-y-algo-malcriada-según-su-criterio y su conducta de padre-déspota-alemán-que-se-excusa-en-ser-una-persona-cobarde-para-justificar-todos-sus-errores-y-que-se-piensa-con-la-razón-absoluta-en-todo-en-serio-en-todo-y-sin-excepción tan normales como la vida misma), hay una evidencia: no soy capaz de decirle que ni él es culpable de haber confiado en la persona equivocada.

Jhon es una persona capaz de disociar su trabajo de su vida personal, creo que llego a admirar esa parte de él por mucho que mi subconsciente lo rechace porque no comparto esos valores; pero soy incapaz de decirle lo que hemos descubierto.

Friedrich y yo estamos en su despacho, aguardando a que mi padre haga algún movimiento y dejando que la tensión nos envuelva a los tres. Narciso no dice nada, no porque quiera darme la opción a hablar, sino porque es un poco cretino y le divierte la postura tensa de Jhon.

Seguramente está poniéndose en mil situaciones que no le agradan o que no está considerando aceptar y que nos competen tanto a Friedrich como a mí. Al menos estoy preparada para decirle que ni estoy embarazada, ni tengo planeado casarme hasta los veintisiete como mínimo y que no me mudo a vivir con mi novio sin haber terminado el instituto, en paro y con problemas incalculables de por medio.

—¿Alguno de vosotros va a hablar? —Se quita las gafas, mordiendo la punta de una de las varillas y desviando la mirada de uno al otro—. No tengo demasiado tiempo, me pediste reunirte conmigo, muchacho y me informaste esta mañana de que el móvil de mi hija no funciona. Tenéis cinco minutos para poneros de acuerdo y empezar a hablar.

La actitud de Friedrich cambia de risueña a seria, no es porque él se tense de un momento a otro, más bien es porque sabe que no es momento de vacilar y, en caso de que se le hubiera olvidado, el hecho de recordar la problemática de mi teléfono le ha devuelto a la realidad.

Narciso (Parte 1 y 2)Onde histórias criam vida. Descubra agora