Dreiunddreißig: El efecto Nela Schrödez.

20.4K 955 981
                                    

Capítulo dedicado a _caathycabrera

ओह! यह छवि हमारे सामग्री दिशानिर्देशों का पालन नहीं करती है। प्रकाशन जारी रखने के लिए, कृपया इसे हटा दें या कोई भिन्न छवि अपलोड करें।

Capítulo dedicado a _caathycabrera. Siempre estás leyendo, votando, dando tu amor a la novela y haciéndome muy feliz por recibir tu apoyo. Mil gracias por leerme, por el cariño a la historia y por hacerme sonreír cuando veo una notificación tuya.

 Mil gracias por leerme, por el cariño a la historia y por hacerme sonreír cuando veo una notificación tuya

ओह! यह छवि हमारे सामग्री दिशानिर्देशों का पालन नहीं करती है। प्रकाशन जारी रखने के लिए, कृपया इसे हटा दें या कोई भिन्न छवि अपलोड करें।

Dreiunddreißig: El efecto Nela Schrödez.

—Friedrich —interviene Jhon acercándose a nosotros—, llevaba tiempo sin verte —Sé que está fijándose en la postura que tengo al lado de él y le escucho suspirar—. Estoy demasiado cansado como para amenazarte —dice con un tono de rendición—, ya hablaremos sobre eso otro día. Ahora tengo que ocuparme de toda mi familia, pero las manos las mantienes donde pueda verlas, muchacho.

—Como tú quieras, suegro.

Lucha por no soltar una carcajada puesto que no era ni el momento ni el lugar sin llegar a separarse de mí, pero ofreciendo cierta sumisión a mi padre. Como si fuera un niño bueno que nunca había roto un plato y que esperaba órdenes para cumplir.

La realidad era muy distinta, ni era un chico bueno ni aceptaba que nadie le diera las normas que seguir.

Jhon permite que las comisuras de sus labios se eleven un poco, permitiéndonos observar un gesto casi imperceptible, pero que estaba ahí.

—Va, papá —Se burla Thomas—, no seas tan anticuado.

Thomas y Friedrich no parecían ni conocidos a simple vista porque no les gustaba mostrar el cariño que se tenían en público. No obstante, eran mejores amigos, tenían una complicidad que con sólo una mirada llegaban a entenderse y, lo que más admiraba de ellos es que a las espaldas se defendían y a la cara se sinceraban.

Entre ellos la falta de comunicación no era un problema y, como espectadora, me declaraba fan de una amistad tan sana.

—Lo siento mucho —Narciso decide no soltarme cuando con sinceridad muestra su apoyo—. ¿Se sabe algo más?

¿A qué se refería?

—Si no se reclama la herencia de Oleg Bogdanov se la quedará el Estado, en cuanto a tu padre...

Narciso (Parte 1 y 2)जहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें