Neununddreißig: Vuelve, por favor.

17.9K 1.2K 1.1K
                                    

Capítulo dedicado a todas las personas que estáis leyendo esto, independientemente de cuándo llegásteis, cuánto tiempo habéis estado esperando a que este momento llegue o incluso si conocistéis esta historia allá en 2016 cuando todo era tan distin...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Capítulo dedicado a todas las personas que estáis leyendo esto, independientemente de cuándo llegásteis, cuánto tiempo habéis estado esperando a que este momento llegue o incluso si conocistéis esta historia allá en 2016 cuando todo era tan distinto y aun así os quedastéis o si llegastéis en esta última y definitiva versión porque le visteis algo a esta novela.

Gracias por creer en mí y en estos personajes, gracias por llorar conmigo, reír conmigo, enfadaros conmigo y con los personajes e incluso gracias por odiar a algunos de ellos (espero que a mí no, al menos no mucho).

Gracias de todo corazón por este apoyo desde cada rinconcito de vuestras casas.

Os quiero mucho.

Neununddreißig: Vuelve, por favor

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Neununddreißig: Vuelve, por favor.

10 de febrero, 2020.

Nunca había estado en un funeral antes porque nunca había tenido la oportunidad de estar en uno, ni siquiera en el de mi madre ya que había sido 3 días antes de que yo despertara.

Supongo que había sido un capricho de la vida o simplemente casualidades que me habían roto un poco más.

¿Se suponía que la vida era un ciclo en el que se sumaban experiencias? Porque yo lo que estaba viviendo era una especie de caída libre en el que no llevaba un arnés de seguridad. Eso, o es que soy la reencarnación del ser humano más vil, cruel y sin corazón que ha existido en el planeta Tierra.

Y lo más curioso de todo, si es que esa palabra era la adecuada, es que ahora me encontraba en un funeral, el último de todos a los que habíamos asistido.

Un fin de semana que debía haber sido de celebración y de planificar estrategias políticas en las que yo estaría presente y que sólo me dedicaría a asentir porque hola-no-entiendo-nada-de-lo-que-habláis-pero-seguid-haciéndolo-que-yo-finjo-escuchar, se había convertido en el tormento y había paralizado al país por completo y que había hecho que mi tía y mi abuelo dejaran de lado su odio, su enemistad o lo que les impidiera reconciliarse con su pasado para hacerle frente al suceso que había roto hasta la coraza más dura.

Narciso (Parte 1 y 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora