Sechsundzwanzig: Seguir volando alto.

20.3K 1.4K 571
                                    

Capítulo dedicado a arratesab por todo el cariño, todos sus votos y comentarios a la historia

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Capítulo dedicado a arratesab por todo el cariño, todos sus votos y comentarios a la historia. Adoro verte por mis notificaciones y me hace muy feliz saber que sigues mostrando tu apoyo. ¡Gracias por tanto!

Sechsundzwanzig: Seguir volando alto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sechsundzwanzig: Seguir volando alto.

Soy incapaz de leer el mensaje, no puedo no me siento preparada.

Una llamada entrante.

Dos.

Tres.

O le cojo el teléfono o este no para.

Era insistente y demandante y eso era algo que yo ya sabía.

Las cosas tenían que hacerse cómo y cuándo Narciso quería.

Y yo tenía la respiración tan acelerada y el corazón bombeando con tanta fuerza y rapidez que hasta temía por mi propia salud.

Hago acopio de toda mi fuerza de voluntad y con manos temblorosas respondo, dejando el altavoz activado.

—Técnicamente entiendo tus celos porque yo estaría igual. —habla de carrerilla, como si llevara un buen rato esperando a soltar las palabras y tuviera algo de temor a callárselo.

Nosotros y nuestros tecnicismos, era algo nuestro, algo propio, algo que me daba un poco más de vida por mi estúpido que sonara o pareciera.

Y qué le hacía yo si me había vuelto un poco dependiente a él.

Tenía sólo 17 años y había, no sólo perdido a mi madre en un accidente, sino descubierto que más que un accidente había sido un asesinato, había presenciado un tiroteo y el asesino y culpable de que vivir me diera miedo me había mirado cara a cara, conectando sus ojos con los míos y hablándome como si él no tuviera nada qué ver.

—¿Nela?

Su voz me devuelve a la realidad, a una realidad que odiaba y a la vez me había vuelto adicta a vivirla.

No respondo no puedo.

Preciosa —Friedrich sabe qué apodo usar en cada momento, me conoce más de lo que yo misma le he permitido conocerme—, tranquila.

Narciso (Parte 1 y 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora