El Hijo de mi Jefe. [Furry Yaoi] [Terminada].

Noche a tu lado.

[Zero]
Es una decisión difícil la cual tomar, pero ni siquiera estoy seguro que deba de estar con alguno de los dos, todas las decisiones que he tomado solo me han traído problemas, ya no estoy seguro de lo que tengo qué hacer, así que simplemente voy a tratar de evitar más situaciones desastrosas:
— Es muy amable de los dos quererme ayudar, pero será mejor que no esté con ninguno de los dos, tampoco quiero que haya problemas entre ustedes o que se molesten porque elegí a uno o a otro. Iré a seguir buscando pues no tarda en caer la noche.

Me detienen, Mark mi mira a los ojos:
— No quiero meterte bajo presión, si te hace sentir bien no tengo ningún problema en que te quedes con Bastián, mientras tengas un lugar para dormir será suficiente para estar tranquilo.
— Lo mismo te digo, si quieres estar con Mark en vez de conmigo puedes hacerlo, vine para asegurarme que pasaras una noche agradable a pesar de lo terrible que te hicieron al sacarte sin aviso, si para eso necesitas quedarte con el dragón puedo entenderlo.

Todo sonaba bien, pero olvidaba un detalle:
— Creo que solo seré una carga en ambos casos, mi ropa se fue junto con el camión, tendría que ir para luego volver, ya fui suficiente molestia para...

Bastián me interrumpe tomando mis manos dando una sonrisa tranquila:
— Este momento debe ser muy difícil y solo te complicamos las cosas dándote a elegir lo que tienes que hacer. No te preocupes por eso, mejor quédate con Mark por esta noche, yo los llevo a dónde sea que se encuentren tus cosas, después los llevo a la casa del dragón y así descansas tranquilo.

No estoy seguro de ello:
— Pe-pero...
— Sin peros, ahora sé un buen perrito y déjate cuidar por una vez, ya pasaste por mucho.

Es admirable la forma en que ha tomado esto el lobo, me ha sorprendido sin poder quitar mi mirada de él, desenfoco la mirada cuando Mark se acerca:
— No eres un mal hombre después de todo, bueno, te invito a comer con nosotros, así podré agradecer el gesto que tienes con él.
— Me gustaría aceptar, pero tendré cosas por hacer.

Sin oponerme por mucho solo seguimos a Bastián, puedo ver a ambos hombres, tan diferentes entre sí, pero que tienen algo en común, un porte que es especial, los miro... diferentes.

Vamos por mis cosas, por suerte alcancé a tomar algunas cosas necesarias para dormir ahora y trabajar mañana. Cuando nos deja en la casa de Mark después de que el dragón le diera indicaciones me regreso solo para despedirme de Bastián estando en el asiento del copiloto:
— Gracias por esto, eres... muy amable.

Me sonríe dando una caricias en mi mejilla:
— ¿Ya no estás enojado conmigo?
— No... nunca debí de estarlo, realmente no me hiciste nada malo.
— Creí que te había lastimado.
— Yo soy el que se enamoró, y tu padre era quien se enfocaba en hacerme la vida imposible, pero realmente nunca me hiciste daño. Puedo ver que solo has buscado arreglar algo de lo que no tenías la culpa, lo siento.

Despeina el pelaje de mi cabeza con su mano:
— No hay nada que pedir perdón, me alegra que no haya problema entre nosotros.
— Gracias por llevarnos a la bodega y por traernos, eres un hombre muy lindo.

Beso su mejilla para después volver con Mark, se siente bien no tener problemas por los que deba de preocuparme, he estado tan cegado por las cosas malas que pensaba incluso de mí mismo que no veía el lado bueno de los dos.

[Bastián]
Toco mi mejilla, sus lindos labios tibios se han posado en mí por un momento, fue un beso muy tierno. Me quedo viendo por la ventana del auto hasta que ambos entran a la casa. Cada vez me estoy enamorando más de ese perrito, ahora tengo que irme, no hay tiempo que perder con los planes que tengo.

[Zero]
Vaya... la casa de Mark es muy amplia, no es solo porque haya estado acostumbrado a un lugar reducido, en verdad es grande este lugar:
— Oye, no es la gran cosa, solo es una casa como cualquier otra.

Ríe leve, yo solo bajo mis orejas:
— Lo siento... hace mucho que no estaba en una casa que no estuviera compartida con otras personas, viste por tu cuenta que solo era un pequeño espacio que podría caber aquí adentro sin problema.
— Perdón... estoy tan acostumbrado a esto que no me doy cuenta de lo afortunado que soy al vivir en un lugar así. Para mí es normal, pero no todos lo ven de la misma manera. Bueno, ve a tomar una ducha, yo me encargo de algunas cosas aquí, espero que hayas traído esa ropa interior traviesa.

Me hace sonrojar:
— No lo puedes olvidar, ¿cierto? Solo superalo.
— ¿Yo? ¿Qué hay de ti? No debería de molestarte por una simple mención.
— Será una larga noche, ¿no es así?
— Tan larga como quieras, pastelito.

Sonrío para abrazarlo, al ser más alto quedo a la altura de su pecho:
— Gracias por darme un techo para dormir esta noche. Por cierto, ¿me puedes guiar para tomar la ducha?
— Cierto, no conoces aquí. Te acompaño.

De manera respetuosa me lleva, mientras estoy aquí solo parece que quiere jugar un poco, pero nunca pasa los límites. Pasamos desde haber tomado esa ducha, comer juntos, hasta al final llegar a la hora de dormir.

Todo está muy bien, excepto por una cosa:
— ¿Dónde iré a dormir?
— Bueno, no tengo cuarto extra para invitados, por lo general no suelo recibir visitas por lo que no me preocupo en tener un lugar así. Tampoco puedo dejar que te duermas en el sofá, ni yo puedo dormir allí porque no se hace cama, ¿te molestaría dormir juntos?

Suelto un suspiro:
— Quiero saber si lo entendí, me estabas invitando a pasar la noche en tu casa sin tener espacio o un plan para eso.

Agilmente se coloca detrás de mí para dar un suave masaje en mis hombros:
— Esa era el mínimo de mis problemas, cuando supe que estabas en problema no tenía nada qué pensar, solo tenía que ayudarte. Si te hace sentir mejor puedo quedarme a dormir en el sofá, puedes dormir en mi habitación, creo que no me hará daño una o varias noches ahí.

Me siento mal, no puedo solo hacerle eso a Mark, en verdad se está esforzando por darme su apoyo, tendré que darme prisa en encontrar otro lugar para dormir:
— Vamos, pero que ni se te ocurra hacer algo extraño, ¿entendido?
— Pastelito, te dije que no iba a hacer nada malo, al menos nada que tú no quieras.

Da una leve mordida a mi oreja, me hace sonrojar, solo me retiro de él:
— M-mejor vamos a dormir.

Lo sigo hasta su habitación, él se recuesta en su cama al llegar:
— ¿Sabes? Suelo dormir solo en ropa interior... a veces, pero para no incomodarte, esta noche voy a dormir vestido, ven, toma lugar.

Con duda me acuesto lentamente, al estar junto a él de esta manera me parece muy raro, así que le doy la espalda esperando un momento a quedar en la oscuridad, vuelvo a sentir cuando Mark se queda a mi lado.

Trato de cerrar los ojos para dormir, pero soy sorprendido cuando el dragón me abraza desde atrás:
— ¿Qué se supone que estás haciendo?
— Vamos, no tiene nada de malo, solo somos dos chicos durmiendo juntos.
— Por favor... solo no hagas nada más.
— Entendido, deja de preocuparte por eso, si hubiera querido hacer algo más ya lo habría hecho.
— De acuerdo.
— Dulces sueños, descansa.

Esto es nostálgico, alguien despidiéndose de ti antes de ir a dormir, a veces duermo entre gritos de los vecinos o escuchar como golpean con sus muebles las paredes, ¿por qué hacían eso? En fin, ahora es diferente, se siente muy pacífico, me da calor, es tan... lindo:
— También descansa, linda noche.

[Mark]
Estoy abrazando a Zero desde atrás, parece que se quedó dormido, es tan lindo así, se ha hecho bolita aferrándose a mi brazo, no puedo imaginar las noches tan solitarias que ha pasado, debe ser nuevo para él dormir al lado de otra persona, lo que me da gusto es ver lo tranquilo que se ve.

Mi pastelito parece un ángel dormido, debo agradecer a Bastián, de no ser por su decisión esto no estaría pasando, me gustaría que algún día esto no fuera algo por una distinción negativa, que sea más bien algo que pueda tener noche tras noche, amo a Zero.