Paisaje Pastoral del Renacimiento

23

Capítulo 23

Parece que nunca le ha prometido nada a Lei Jun. Su relación se ha desarrollado con tanta naturalidad que Xia Chen ni siquiera reaccionó. En el corazón de Lei Jun, él seguía siendo la misma persona a la que antes le gustaba mucho Wei Qianyu, no la persona que era diez años después.

No es de extrañar que Lei Jun tenga esa expresión.

"Sabes sobre la visita de Wei Qianyu" Xia Chen miró a Lei Jun a los ojos, con ojos tranquilos. De todos modos, no tenía nada que ver con Wei Qianyu y nunca había pensado en ocultarle nada a Lei Jun. Ayer, como Lei Jun vivía aquí, estaba nervioso, luego se quedó dormido sin darse cuenta y se olvidó de mencionarlo.

"Sí" Lei Jun no esperaba que Xia Chen tomara la iniciativa de mencionar lo que estaba pensando en ese momento. Se quedó atónito por un momento, asintió con la cabeza y no supo qué decir.

"No tendré nada que ver con Wei Qianyu de ahora en adelante, no pienses demasiado en eso", Xia Chen luchó en su corazón por un momento, miró directamente a Lei Jun y explicó seriamente. Después de decir algo así como una confesión, Xia Chen se sonrojó un poco porque sonaba como una mujer.

Después de escuchar las palabras de promesa de Xia Chen, Lei Jun miró a Xia Chen con ojos brillantes y preguntó felizmente: "Xiao Chen, cuando dijiste esto, ¿prometiste estar conmigo?" El tono era obvio. Exudaba placer y emoción.

Al ver que Lei Jun en realidad hizo una pregunta tan estúpida, Xia Chen le puso los ojos en blanco directamente. La incomodidad en ese momento desapareció por completo. Quería regañar a Lei Jun en su corazón. Si él no quisiera, dejaría que Lei Jun irrumpiera en la habitación. Ahora que los dos dormían en la misma cama, en realidad hizo una pregunta tan idiota.

Sin embargo, Xia Chen lo pensó, desde ese incidente, parecía nunca haberle prometido nada personalmente a Lei Jun, por lo que no es de extrañar que Lei Jun se sintiera incómodo.

Pero, por otro lado, Lei Jun realmente se preocupa por él. Pensando en esto, Xia Chen no tenía nada de qué sentirse incómodo bajo la mirada de Lei Jun. Él asintió con fuerza y ​​respondió en voz baja: "Sí".

Después de escuchar las palabras de Xia Chen, Lei Jun sintió que toda la molestia acababa de desaparecer. Una satisfacción sin precedentes llenó todo su corazón, abrazó felizmente a Xia Chen y juró solemnemente palabra por palabra al oído de Xia Chen: "Xiaochen, te cuidaré bien de ahora en adelante".

Escuchando los votos sinceros, simples de Lei Jun, Xia Chen, que se estaba poniendo más rígido en sus brazos, relajó lentamente su cuerpo, levantó las manos para abrazar a Lei Jun y apoyó la cabeza en el hombro de Lei Jun.

En este momento, Xia Chen incluso tuvo ganas de llorar. Había escuchado tantas dulces palabras de Wei Qianyu en su vida anterior, pero al final no terminó así.

Quizás lo que ha estado persiguiendo y deseando durante toda su vida sea un juramento tan simple.

"Lo sé" Xia Chen levantó la cabeza, miró directamente a Lei Jun con los ojos llenos de emoción y respondió felizmente. En este momento, ambas partes sintieron claramente los sentimientos del otro.

Finalmente, cuando Xia Chen le respondió, Lei Jun ya no estaba tan reservado como antes y besó a Xia Chen en los labios. Xia Chen puso sus manos alrededor del cuello de Lei Jun y respondió.

"Wooohhhhhh..." Xia Chen casi no podía respirar mientras se besaban. Su capacidad pulmonar realmente no era rival para la de Lei Jun. Lo golpeó con su mano. Solo entonces Lei Jun reaccionó e inmediatamente soltó a Xia Chen.

Xia Chen respiró hondo antes de recuperarse. Si alguien supiera que casi muere asfixiado debido a la persistencia de la pasión de su amante durante un beso, realmente perdería toda la cara.