Cuando dos Alfas se encuentran, uno es Omega

Capítulo 41: Nada más que tres

Li Ting pensó que era un poco extraño.

Parece haber olido un Omega en el baño del macho Alfa.

No fue tan dulce, pero puede darle a cualquier Alfa ese tipo de posesividad en un instante.

Es muy tentador en cierto modo.

Sin embargo, fue sólo por un momento y luego el olor acre del desinfectante se mezcló con su nariz. ¿Cómo podría un Omega atreverse a entrar aquí? Pero incluso si parece imposible, todavía se pregunta si, de alguna manera, realmente hay un Omega dentro. Y así, miró hacia el cubículo cerrado y no pudo evitar tocar el tabique cerrado. "¿Hay alguien ahí dentro?"

Está Jian Songyi en él.

Es consciente de que si no responde, no hay manera de que pueda ir a ninguna parte.

Jian Songyi intentó calmar su mente, adoptando su habitual tono perezoso e impaciente: "Tonterías. Si no hay nadie, ¿eso significa que soy un fantasma?"

¿Jian Songyi?

Li Ting hizo una pausa por un momento mientras miles de pensamientos pasaban por su cabeza. Pero en cuanto estuvo a punto de decir algo, de repente sintió que la luz disminuía un poco. Cuando giró la cabeza, una figura solitaria entró lentamente. Bloqueando la luz natural de la puerta.

Sin esperar a que Li Ting se diera cuenta de quién era, el hombre frente a él se paró con un tono frío: "Disculpe, por favor".

Li Ting dejó de mirar al hombre alto con los ojos entrecerrados.

¿Bai Huai?

¿Con un bolso a la espalda? ¿Ya terminó el examen? Pero todavía falta una hora para que todo acabe, ¿no? ¿Qué está sucediendo?

Li Ting se sintió aún más confundido porque permaneció de pie en su lugar, completamente estupefacto y perdido en sus pensamientos.

Bai Huai arqueó la ceja con impaciencia: "todavía hay siete cubículos vacíos y, sin embargo, has elegido hacer cola frente a este cubículo. No tengo ningún problema con eso, pero por favor no te interpongas en el camino de otras personas".

Luego extendió la mano y detuvo a Li Ting antes de dirigirse directamente al cubículo al lado del de Jian Songyi. Bai Huai luego cerró la puerta.

Al escuchar la voz de Bai Huai, Jian Songyi se sorprendió un poco, pero tampoco tanto. Inconscientemente, Jian Songyi comienza a relajarse cuando de repente se tranquiliza y levanta la comisura de sus labios.

Después de que Jian Songyi se tranquilizara, trató de hablar en su tono habitual: "Tal vez este estudiante quiera ver el hoyo en el que me agaché. Lo entiendes, ¿verdad? Después de todo, son los excrementos del rey".

Bai Huai: "Entiendo".

"....."

Cuando escuchó a los dos hombres hablar entre sí, hicieron que Li Ting pareciera un pervertido que los siguió al baño de la escuela solo para poder recoger la caca del mejor estudiante.

Li Ting estaba un poco avergonzado, pero aún no estaba reconciliado. Así que no pudo evitar hacerle la misma pregunta: "¿Oliste un Omega hace un momento?"

Jian Songyi pensó en una manera de responderle. Afortunadamente, Bai Huai habló primero: "¿Qué parte de esto es olor a Omega? ¿El desinfectante? ¿O quizás el olor del baño de hombres? Si esa es tu descripción del olor a Omega, entonces te sientes muy miserable".

Mientras hablaba, Bai Huai apoyó la espalda contra la partición y se agachó para entregar el inhibidor que se encontraba debajo de la partición con el revés.