Mercy

Inicio del dolor

La oscura noche es iluminada por una hermosa y luna llena, las luces de los autos pasan al igual que mis lagrimas, el camino a casa se hace largo, doloroso y eterno. Sé que me observa durante el camino pero no he gesticulado palabra alguna desde mi descubrimiento al cual no ha respondido. Anhelo estar en mi casa, en mi habitación en mi refugio. Lejos de este lugar tan doloroso y ambicioso. Lejos de él. Me ha dicho que me amaba y le he creído. 

Al llegar a casa, no espero que Kenny abra mi puerta, la abro y con pasos decididos me adentro a la casa mi cabeza estallara y el dolor se desborda por mis poros, pero algo me detiene.

-Lía por favor no reacciones de esta forma, necesitamos hablar sobre esto- su mirada me hace perderme por segundos 

-Fuego o agua Said, no ambos- digo soltando su agarre y caminando de regreso a la casa. 

Al entrar en esta algo me detiene, el señor Fakhir ha reunido a toda la servidumbre, a la familia Akram entre estos Jasmin, y por ultimo observo a Malina y a sus padres. algo no está bien. 

-Salam Aliekum familia- dice con una copa de champaña en su mano, su sonrisa de pirata se hace presente. 

La expresión de Said empalidece, y rebusca por el lugar y me observa, sus ojos transmiten muchas cosas pero entre esas sé lo que dicen. Una desleal lagrima resbala por mi mejilla y aparto la mirada. 

-Los he reunido esta noche por una ocasión muy especial a todos, mi hijo Said Akram-Said interrumpe a Fkahir y este le observa con molestia 

-Padre no lo hagas, no hoy.- Said corta a Fakhir y solo puedo escuchar el fuerte palpitar de mi  corazón 

-Mi hijo Said Akram contraerá matrimonio por segunda vez, y la nueva integrante será la niña de mis ojos Malina Orzibit. 

Jasmin me observa y niega con su cabeza, cierro mis ojos y dejo que el ruido de los aplausos llene mi cabeza. Aquí no hay nada que hacer. Tomo mi vestido y me dirijo rápidamente a las escaleras, ya he sido humillada lo suficiente por hoy. 

-Lía- la voz de Said hace que mis lagrimas se terminen de derramar y no volteo, esta vez no volteo por el hombre que amo. Dejo que terminen el festejo el grupo de extraños con el que he convivido por meses. 

Al terminar el ultimo escalón, el dolor se arremete contra mi, fuertes sollozos salen de mi garganta, el solitario pasillo hace que el eco de mis sollozos sean mas fuertes. 

-Señorita se encuentra bien?- la suave voz de Bel se hace presente en el lugar 

-Sí....si por favor Bel prepara otra habitación esta noche no dormiré en la principal agradeceré que todas mis cosas sean removidas antes de que Said ingrese a esta- digo con lagrimas en mis ojos. 

-Sí señora.-dice mirándome con compasión y tristeza. 

Sin más entro a la habitación, su aroma está por todo el lugar y el dolor aumenta su traición es grande mi amor por Said es grande y ahora otra mujer también lo tocará y dormirá a su lado. Incapaz de mirar la cama en la cual me he entregado por completo, quito el vestido de mi cuerpo cae como cascada hacia el frío suelo. En sujetador y bragas camino reuniendo mis cosas por la habitación, mis perfumes, cepillos, maquillaje, y los uno en una de las maletas.La puerta de la habitación se abre rápidamente y abre paso a un Said irritado. 

-Lía por favor déjame hablar- su gruesa voz resuena por el lugar

-Felicidades en tu segunda boda- sin voltear sigo empacando mis cosas en la pequeña maleta.

-Por favor escuchame Lía

-Creo que lo he hecho desde hace dos meses Said, he escuchado tus ironías y mentiras y las he creído pero esta vez el final.