Capitulo 32

14.1K 797 15
                                    

Despierto sobresaltada por un ligero toque insistente en mi puerta. Busco con la mirada a cada esquina, estando completamente sola en mi habitación. Los toques vuelven a escucharse y luego de unos segundos de quedarme como una idiota mirando en dirección del sonido reaccionó...

— ¿Si?

— Buenos Días señorita, lamentó muchísimo despertarla pero alguien está llamando a su puerta desde hace más de media hora. Un tal López espera fuera... ¿Le digo que espere?

Me quedo anonada, parpadeando repetidas veces sin dejar de mirar a la puerta. Frunzo el ceño. ¿Porqué hace eso? Anoche estuve una plática rápida con ella. Donde claramente le deje claro que soy "Alina" no "señorita" segundo no está aquí de mi sirvienta o etc. Cada cuál hará sus cosas. Y tercero ¿Qué diablos hace López aquí?

Me levanto de la cama rápidamente y abro la puerta. Topándome con Fabiola perfectamente vestida. Su vestimenta parece un atuendo de oficina. En cambio yo solo estoy en pijama.

— ¿Qué es eso? – pregunto señalándola. Ella se mira.

— Su padre me ha dado un puesto en la oficina como asistente personal...

— ¿De verdad? ¿Desde hoy?

— Si, deseo buscar algo para mí. No me gusta ser una molestia.

Optó una expresión cansada.

— No eres molestia Hender, deja de decir bobadas... – hago el amago de irme nuevamente a mi habitación pero ella vuelve a detenerme.

— ¿Le digo a López que espere?

¡Oh mierda! Lo había olvidado por completo. Cabrón de López, ¿qué demonios hace aquí?

— ¿Qué rayos hace aquí?

Fabiola me observa, totalmente confundida.

— No tengo tiempo para eso... Es demasiado temprano para ver su estúpida cara. Dile que no estoy. – ella me ve apenada.

— Le dije que usted estaba dormida...

— Hender ese tipo no puede entrar aquí. ¿Vale? – camino afuera. Ella me sigue. — Voy a meterme en problemas por esto...

Pasó directo a la ventana que da al frente del apartamento. Y la abro. Efectivamente López está abajo. Cruzado de brazos recostado a la puerta de su auto. Se le ve bastante bien desde esta distancia. Unas gafas de aviador con una polo gris y unos jeans cortos. Bastante casual.

— ¿Qué crees que haces? – le grito.

Él sube su mirada hasta mi y al verme sonríe de oreja a oreja.

— Hola mañanera

— Te hice una pregunta

— Deseo decirte algo...

Frunzo el ceño. Me cruzo de brazos. ¿Qué pasa ahora con él? Muy mala idea en decirle mi dirección. Bravo Alina la cagas nuevamente. Esto te va a traer problemas, muchos problemas.

— ¿Y bien?

— ¡Baja!

Levantó las cejas. ¿Pero quién se cree que es? Viene a estas horas de la mañana, exactamente las ocho menos cuarto a plantarse como un idiota frente a mi casa, solo por qué quiere decirme algo... ¡Cabrón!

— Anda mujer. Será rápido... O déjame subir – hace un gesto divertido. Arqueo una ceja.

Giró y me topo con Fabiola muy cerca de mi. Intentaba de mirar. Le pasó por el lado agarrando una taza de café.

Enamorándome de Tí (+18) # 2 [Segunda Parte] {Completa}Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu