Capitulo 34

14.6K 855 21
                                    

Pasan unos largos minutos que manejo de forma serena. No hay mucho tráfico a pesar que es bastante tarde ya. He bajado un poco el volumen de la radio. Una canción leve se escucha de fondo mientras hecho un vistazo a mi alrededor, con prudencia ya que aún sigo al volante. No lo había comentado pero me fascina como se ve la ciudad en la noche. Me tranquiliza, me hace sentir viva. A los pocos minutos estoy por entrar al garaje. Como es costumbre los guardias de seguridad están justo delante. Al percatarse me dejan pasar con un gesto de cabeza de parte del más mayor. Entro luego de sonreírle de forma educada. De forma bastante lenta busco donde dejar mi auto. Definitivamente Omar esta loco, observó de una vez todos los autos que tiene. Es una locura... Me detengo delante del Ferrari. Niego con la cabeza y aparcó mi auto muy cerca del ascensor. Agarro mis cosas y me desmontó. Mi teléfono comienza a sonar.

Hola.

Hija cariño. Estoy frente a tu casa.

Me detengo. ¿Porqué o qué?

Papá no estoy en casa.

Es tarde. ¿Dónde andas?
Suena bastante serio. Ahora no papá.

He venido a casa de Omar.

– ¿No estás muy apegada a él?

No papá, claro que no.

Es mi novio papá... ¿Pasó algo?
Camino al ascensor.

Quería pasar tiempo con mi hija.
Suena un poco resentido.

– Lo siento pa' pero tengo planes.
Me encojo de hombros aunque sé muy bien que no va a verme.

– ¿Qué tal si mañana desayunamos?
Ahora suena esperanzado. ¿Cómo le digo?

Creo que lo haré con Omar...

Gruñe.

– ¿Tendrás algún momento con tu padre?

– Claro que si papá. Solo tenes que avisarme con algo de tiempo. ¿Eh?
Observó como los números de los pisos suben despacio.

He pasado a ser un segundo plano para ti.

¡Dios mío! Pero que persistente. Acaba esta conversación ya Alina. O seguirá articulando y terminarás corriendo donde él.

– ¿Podemos hablarlo luego?... Te quiero.
Las puertas del ascensor se abren. Pasó.

Ni siquiera opinar ya puedo. Alina, Alina.

Adiós.

Adiós hija.

Cuelgo la llamada, suspiro mirando hacia arriba. Los hombres de mi vida son unos celosos, peleones y veinte mil cosas más. Tendré que ser tan paciente con todos ellos.

— Buenas noches señorita Alina.

Bajo la mirada y me encuentro a Lici bastante cerca de donde estoy. Va muy linda vestida. Con una bolsa bastante grande en su hombro.

— Nana. ¿Vas a alguna parte?

— He terminado por hoy mi niña. ¿Necesita algo? ¿Ceno? ¿Si lo desea puedo prepararle algo rápido?

No puedo evitar ponerle una sonrisa de oreja a oreja. Es tan gratificante eso, sus atenciones a pesar de que no fue a mí a quien crío. Ella se me queda viendo y me sonríe con ternura poniendo su cabeza de medio lado.

— Ya cené. Pero gracias. – miro por encima de su hombro. — ¿Omar?

Su rostro cambia por completo.

Enamorándome de Tí (+18) # 2 [Segunda Parte] {Completa}Where stories live. Discover now