Volver a verla. [2] (BILOGIA)

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Vuelvo hacia la cocina con mi mochila en las manos. Meto el revolver que escondí, en la mochila sintiendo alivio por no haberlo usado y luego me pongo mi traje de baño. Quiero traerla a casa conmigo y que termine esta maldita fiesta. Salgo hacia la fiesta y en el camino a la piscina me encuentro con Martín totalmente ebrio.

— Mi amigo, mi hermano, mi socio... - Se ríe. — ... mi psicópata. — Me suelta arrastrando las palabras con una sonrisa torcida.

¿Psicópata? Pongo los ojos en blanco cuando cae a mis brazos. Está con el traje de baño y totalmente mojado

— Mierda. No volverás a entrar al agua.

— Pero quiero entrar. Julieta esta ahi...

— Con mas razón. Te puedes ahogar...— Le suelto mientras lo empujo para que camine.

Llegamos hasta la piscina y veo que Ivanna esta hablando seriamente con Julieta. Ambas alzan la mirada y nos miran. Creo que tengo que ir a disculparme con esa maldita bruja de Julieta.

— Ve a vestirte. — Le ordeno a mi mejor amigo. — No me hagas llamar a los de seguridad para que te obliguen.

— ¿Puedo entrar una vez mas? — Insiste con voz dura.

Lanzo un suspiro de disgusto.

— Mientras no te olvides como nadar...

Ambos entramos y comienzo a nadar por entre la gente que esta jugando en el agua, hacia Ivanna y Julieta. Antes de llegar observo que Julieta se pone detrás de Ivanna, como si se estuviera protegiendo de mí. Miro solo a Ivanna.

— ¿No tenías nada que decirle a Julieta? — Me pregunta.

Suspiro. Julieta sale tímidamente de atrás de su amiga.

— Quiero pedirte disculpas por amenazarte, gritarte y romper tus cosas. — Me obligo a hablar sin expresión alguna en el rostro.

No me arrepiento de nada. Nos quedamos callados un momento.

— Muérete. — Me suelta.

Me toma por sorpresa pero no me dura mucho. Perra idiota.

— Muérete tú. — Le contesto apretando los dientes y los puños por debajo del agua.

Nos fulminamos con la mirada.

— Es suficiente. — Interviene Ivanna.

— Pero Ivanna... — Le suelta Julieta.

— ¡No! — Grita ella.

Suspira, intentando calmarse.

— Ya estoy bastante lastimada... — Nos dice.

— No quiero que te lastimen más. — Le contesta Julieta casi apretando los dientes.

Entorno la mirada. Maldita perra...

— No la lastimaré. — Le contesto yo aunque no me lo diga a mí.

Ambas me miran. Julieta mira a Ivanna esperando que haga algo pero como no hace nada, me fulmina con la mirada.

— Será mejor que me vaya. — Balbucea entre dientes.

— No. Quédate. — Le pide Ivanna con voz dulce.

¡No! ¡Que se vaya!

— Yo puedo darme cuenta cuando no me quieren. — Espeta con voz dura.

Exacto. Es mas. No es que no te quiero. Te odio. Frunzo el ceño sin disimulo.

— Yo si te quiero.