𝙎𝘼𝙂𝘼 𝙇𝙀𝙏𝘼𝙇𝙄𝙎
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En cada extremo del pueblo, tanto en Eurion como en Ordana, viven seres fantásticos, humanos con habilidades fuera de este mundo, pero, este sitio no es tan agradable como podría parecer, aqui no hay cuentos d...
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¿Quién es el enemigo? ❅──────✧✦✧──────❅
—¿Qué hacemos?, hay que decirle,—escucho a Katrina hablar con alguien.
¿Qué está pasando?
Abro mis ojos por completo y mi cuerpo se encuentra cubierto de agua de la que sale vapor hirviendo y me transporta un calor reconfortante. Intento levantarme y mi cuello cruje haciendo eco en todo el cuarto.
Me llevo la mano a la cabeza y por un momento siento que me desmayaré, pero no pasa.
—¡Thais!, ¡despertaste!— Grita Katrina corriendo a abrazarme.
Aprieto con fuerza la toalla que cubre mi cuerpo, suplicando que no se caiga.
—Sueltame—digo secamente.
—¡Oye!, ¿Por qué eres asi?, solo me emocionó que estés mejor, no tienes que ser tan amargado...—su rostro demuestra pura tristeza y sus ojos estan resguardando lágrimas.
—Yo sólo dije que me sueltes, aún me duele Katrina.
—Perdón...—dice antes de marcharse y dejarme sólo.
Me dirijo a mi cuarto y me pongo ropa. El hecho de que he estado desnudo mientras dormía no me deja tranquilo.
Luego de ajustar los cordones de mis botas, salgo, con la esperanza de encontrar a Cameron en la sala, pero en su lugar está Alex, quien me dice que Cam aún no regresa de las tiendas, lo que es preocupante ya que el nunca llega tarde y ya pasó tiempo desde la hora a la que dijo volvería.
¿Dónde estas Cam?
—Alex, tengo que buscar a Cameron y a Lionn, quédate aquí si quieres—digo tomando mi abrigo para salir del Búnker.
—Iremos los dos—Dice Katrina refiriéndose a Alex.
—¿Qué yo que?—habla Alex con una risa nerviosa.
—Bien, los demás se quedarán aquí por si regresan, ¿está bien?—les digo a los demás marcados que están dentro.
Todos asienten asi que emprendo mi rescate.
—¡esperen!, ¿Quién dijo que yo quería ir?—Alex chilla atravezandose en mi camino.
—Pensé que querrías buscar a tu hermana...—suelto.
—oh, ni lo intentes rambo, ¡no lograrás que me sienta culpable!.
—No estoy haciendo nada—Una sonrisa deja mis labios.
Se siente bien está vivo.
—Pues, si voy a ir pero no porque tu lo dijiste, ¡voy porque yo quiero!, ¡que te quede claro!
—Clarísimo—digo riendo para luego salir del búnker.
Me lleva horas llegar al pueblo pero junto con Katrina y Alex encontramos la entrada al centro de la ciudad, la cual esta tapada y custodiada por cazadores.
