Capítulo 24, Parte 2

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"¿Qué pasa? Mmmm, déjame traerte el desayuno. Comamos en la habitación", dijo Kamol, al ver a Kim salir del baño por la mañana con una expresión débil. Esta mañana, Kamol y Kim no bajaron a desayunar con los demás. Debido a que Kim se despertó tarde, Kamol se esperó para comer con Kim.

"Está bien", respondió Kim mientras se acercaba lentamente para vestirse. Kamol sonrió levemente.

"Es extraño, no veo que quieras esconder hoy, lo que te hice ayer", preguntó Kamol fingiendo. Kim lo miró levemente.

//Me hiciste gritar, luego volviste a hacerlo, no puedo ocultarlo todo// murmuró Kim en voz baja, sintiéndose un poco avergonzado.

"Eh, ¿qué dijiste?" Kamol lo escuchó, pero se atrevió a preguntar.

"Deja de hablar, deja de preguntar, Khun Kamol". Kim se dio la vuelta con voz severa, pero no tan serio. Trataba de esconder su vergüenza.

"Eh, siento que necesitamos una cama más grande", dijo Kamol casualmente.

“Persona loca”, dijo Kim, no pudo evitar salir al baño. Kamol se rió suavemente en su garganta. Después de que Kim terminó de vestirse, se sentaron a comer con Kamol en el balcón de la habitación, porque hoy el sol no es muy fuerte.

"Hoy volvemos a casa juntos", dijo Kim casualmente.

"¿Por qué? ¿No quieres volver, eh?", preguntó Kamol.

"No exactamente. Me siento extraño, no sé cómo decirlo. Me desperté sintiendo el palpitar lento de mi corazón. Una parte de mi corazón quiere quedarse y no quiero volver ", dijo Kim en voz baja, porque realmente se sentía así

“¿No dormiste lo suficiente? ¿O todavía estás cansado?", preguntó Kamol preocupado porque pensó que los síntomas que tenía Kim probablemente se debían a un descanso insuficiente.

"No lo sé", respondió Kim, suspirando. Kamol tomó la mano de Kim y la apretó ligeramente.

"Si sientes algo más, tienes que decírmelo, ya sabes", dijo Kamol en un tono serio. Kim asintió y sonrió suavemente, luego volvieron a sentarse y comer hasta estar llenos. Kim fue a empacar su ropa y pertenencias en su bolso para prepararse para el regreso a casa. Y guardó también la bolsa de Kamol.



“¿Ya revisaron su equipaje?” Kamol preguntó a todos mientras se reunían en el auto para prepararse para regresar a Bangkok.

"Sí", respondieron los subordinados de Kamol antes de subir al coche y sentarse como cuando llegaron. 



"¿Qué te pasa, Kim?", preguntó Kamol con tono molesto. Vio a Kim mirando fuera del auto con una expresión sombría. Kim se volvió para mirar a Kamol con una suave sonrisa.

"Nada, solo estaba pensando en algo", respondió Kim, antes de apoyar la cabeza contra el fuerte hombro de Kamol. Kim se sintió raro. Tenía ganas de regresar a Bangkok, se sentía mareado, no podía decir nada. Cuando le contó a Kamol sobre sus sentimientos, temió que Kamol acusara demasiado a Kim.

“¿Pasamos a comprar algunas cosas para la gente en casa?” Kamol invitó, Kim sonrió y asintió. En el camino, Kamol se detuvo en una famosa tienda de recuerdos. Todos llevaban muchas cosas de un lado a otro. Kamol le dio dinero a Lop para que comprara recuerdos para todos los subordinados que vigilaban la casa.

"Khun Kamol, pruébalo, está delicioso". Kim se acercó y señaló la boca de Kamol. Kamol abrió la boca para aceptarlo.

"Um, es realmente delicioso. Cómpralo también", dijo Kamol, entregando a Kim el dinero para que lo comprara. Los dos fueron de compras por un rato y luego se sentaron en una silla. Después de un rato, Kom se acercó un poco tenso.

Te llevaré a mi casa... Y serás mi esposaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora