Capítulo 11

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Bian Nan miró a Qiu Yi que estaba acostado sobre la cama y no habló durante mucho tiempo.

Cuando Shen Tao y Jiang Kai llevaron a Qiu Yan a la sala, Qiu Yi esta acostado en la camilla, viendo televisión y con la pierna derecha colgando en el aire

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Cuando Shen Tao y Jiang Kai llevaron a Qiu Yan a la sala, Qiu Yi esta acostado en la camilla, viendo televisión y con la pierna derecha colgando en el aire. 

—Muy imponente —Shen Tao tocó el yeso de su pierna: — tengo tu bicicleta, pero no pude restaurar la pintura que se cayó ni tampoco encontrar una pintura del mismo color, así que solo puedes optar por cambiar por una nueva.

—Está bien —Qiu Yi vio a Qiu Yan colocar una olla de sopa en la pequeña mesita que estaba al lado de la cama, se acercó y tocó su cabeza— ¿De dónde vino esa sopa?  

—Yo lo hice, es sopa de huesos —dijo Qiu Yan— toma sopa de huesos para tus huesos. 

—Tonterías —Qiu Yi le dio unos golpecitos al frasco de la sopa: — No tenemos esta clase de frascos en casa. 

—El frasco es de la abuela Li —Qiu Yan frunció el ceño, no se atrevía a decir que la sopa fue comprada y mucho menos que alguien más la compró— Date prisa y bébela. 

—Erbao, ve a buscar un poco de agua caliente —Shen Tao agitó la tetera que estaba junto a él— ¿Puedes hacerlo?

—Sí —Qiu Yan tomó la tetera, se dio la vuelta y salió apresurado de la sala. 

—Lo controlas demasiado, te trajo sopa de huesos para que la bebieras y solo le haces muchas preguntas —Shen Tao abrió el frasco y lo olió. 

—Sabe que no se le permite gastar dinero innecesariamente —Qiu Yi miró la televisión: — También sabe que tampoco se le permite mentir. 

—Sus piernas tiemblan cuando te ve, ¿no solo te compró esa sopa de huesos para ti? —Jiang Kai resopló— además también mientes y entre hermanos siempre quieren tomar la delantera del otro. 

—¿Cuándo he mentido? —Qiu Yi lo miró. 

—¿Quién fue él que hizo esto? —Shen Tao señaló su pierna, volviendo a golpear su yeso— ¿Pan Yifeng? 

—¿No dijiste que él mismo lo reconoció? —Qiu Yi sonrió. 

—Entonces cuando te den de alta del hospital, ¿A quién iremos a buscar? —Shen Tao lo miró fijamente. 

—Pan Yifeng —Qiu Yi tomó el frasco de sopa que estaba junto a él. La cuchara era desechable, entonces el frasco fue conseguido de la casa de la abuela Li, y al parecer, ella usaba cucharas desechable a la hora de comer...

Shen Tao y Jiang Kai se fueron poco después de quedarse en la sala y tuvieron que regresar a la escuela. Ya que ahora el director va a hacer una revisión a los salones una vez al día, y a excepción de aquellos que no viven en el campus, todas los demás que se registraron en los dormitorios deben ser contadas. 

DOS LOBOS Y UN BOLLOWhere stories live. Discover now