Capítulo 74

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¡Hola, cariño!

¡Hola, cariño!

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—Tú... —los ojos de Bian Xinyu se abrieron y las lágrimas rodaron por sus mejillas: —¿Cómo es que tú...? 

Qiu Yi se quedó en silencio, se apoyó contra la pared y la miró. 

Bian Xinyu lo miró fijamente durante mucho tiempo, para finalmente darse la vuelta y correr de regreso al restaurante. 

Qiu Yi miró su espalda y dejó escapar un largo suspiro de alivio, sintiendo que su cuerpo se volvió un poco débil. 

¡Lo dijo! 

¡Él mismo lo dijo! 

¡Fue capaz de enfrentar a Bian Xinyu! 

Su mente estaba hecha un caos, no mucho más tranquila que la de Bian Xinyu. 

Después de estar aturdido por unos minutos, volvió a sus sentidos y sacó su teléfono. Sus dedos temblaron mientras se deslizaba por la pantalla. 

Marcó el número de Bian Nan y sonó por bastante tiempo antes de que Bian Nan contestara el teléfono: —Oye, estaba jugando con alguien en este momento, ¿acaso me extrañaste? 

—Bian Nan —Qiu Yi sostuvo el teléfono, su voz aún era un poco ronca y le fue difícil hablar: —Lo siento, acabo de...fui un poco impulsivo. 

Si, tal vez fue impulsivo. En ese momento, no pensó hacia qué tipo de situación empujó a Bian Nan. 

—¿Qué sucede? ¿Hablaste con Bian Xinyu? —preguntó Bian Nan con una sonrisa. 

—Es algo mucho más serio que eso, —Qiu Yi tomó un hondo respiro y lo exhaló lentamente: —le dije que me gustan los hombres y que tengo novio. 

Después de que Qiu Yi le explicó brevemente el incidente a Bian Nan, Bian Nan de repente perdió la voz. Qiu Yi esperó un momento y cuando estaba a punto de hablar nuevamente, Bian Nan repentinamente se rió: —Me sorprendiste mucho, de verdad fuiste capaz de decirlo, Qiu Dabao ¡eres increíble! ¡Ven y besa uno! 

Bian Nan besó el teléfono. Qiu Yi estaba un poco confundido, así que tuvo que besar el teléfono. 

—¿Qué es lo que te preocupa? —preguntó Bian Nan: —¿Tienes miedo de que Bian Xinyu adivine que soy yo? 

—Debería ser fácil de adivinar, ella sabe que tenemos una buena relación —dijo Qiu Yi, frunciendo el ceño. Al comenzar a pensar en cómo lidiar con este asunto, dentro de su mente, fue capaz de sentir un ¡boom!

—También tienes una buena relación con Shen Tao, pero si se entera, que lo haga —Bian Nan pensó por un momento, y dijo con indiferencia: —¿Aún así eres capaz de comerme? 

—No lo sé ahora —dijo Qiu Yi: —pero no debes dejar que tu familia lo sepa durante este período de tiempo. Tu pasantía acaba de comenzar, el Año Nuevo está muy cerca y habrá demasiado movimiento si sale a la luz este asunto y tengo mucho miedo de que algo te suceda. 

DOS LOBOS Y UN BOLLOWhere stories live. Discover now