Enseñame a Querer

capitulo 30

La chica de multimedia es la modelo que escogí para Alana (si no se la imaginan así, no importa, más bien díganme cómo se la imaginan) edité su foto para que puedan imaginarla con el comienzo del embarazo. ¡Disfruten!

No se con exactitud cuando fue el día que comencé a despertarme por las noches a cuestionarme y dar vueltas en la cama luchando por conseguir el sueño hasta el amanecer; no sé con exactitud cuando comencé a cuestionarme a mí, cuando los días dejaron de tener buenos despertares. Cuando mi felicidad fue plena y no algo de un instante donde no puedo dejar pasar ese pensamiento de que simplemente no se qué hacer con ella.

Pienso en mis amigos, los cuales en tan poco tiempo se han ganado todo mi cariño. Pienso en mi novio, en como lo amo de una manera que jamás pensé amar y que no estaba en mis planes permitir que pasará, en como me resistí tanto tiempo a él y a mis sentimientos. Pienso en mi familia y en las palabras que salieron de la boca de mi padre la última vez que visité la casa, debería ir pronto.

Pienso en este pequeño intruso que ahora sé que crece en mi vientre y que a pesar de haber sido toda una sorpresa en un momento inesperado puedo asegurar que lo quiero. Si antes no tenía una razón para echarle ganas a la vida ahora la tengo, mi pequeña gran razón. Ahora hay alguien que necesita todo de mí, que en unos meses estará en mis brazos, un amor incondicional, un pequeño que guiaré y cuidaré con todo mi ser.

Sonrio mirando mi cuerpo de perfil en el espejo de cuerpo completo, específicamente a mi estómago, ese pequeño bulto apenas notable en mi vientre. Aún me cuesta creerlo, hay días en que lo olvido por completo y otros, como hoy, donde soy muy consciente de ello y sonrio al imaginar ciertas situaciones en un futuro.

- ¿Estás lista? - La voz de Alice al otro lado de la cortina me saca de mis pensamientos.

- Si, ya voy.

Termino de acomodar mi ropa y salgo del vestidor de la tienda con el vestido en mano consiguiendome de nuevo con Alice y Sara. Las graduaciones de los chicos son mañana por lo que sus padres decidieron hacer una gran fiesta que se llevará a cabo en la casa de los padres de Daniel ya que es la más espaciosa y con patio perfecto para la ocasión, por lo que me han dicho.

Cuando nos adentramos a la zona de comida del centro comercial agradezco que hoy no me estén acribillando las náuseas y mareos como en la semana anterior; los cuales son difíciles de ocultar estando en el trabajo o en la universidad. Básicamente me la paso comiendo hielo para calmar eso ¿Como lo logra? Ni idea, pero funciona.

Nos decidimos por un puesto de comida china así que revisamos el menú. Normalmente la comida china no es algo que me encante, me gusta pero no es algo que elegiría como primera opción; aún así hoy me provoca y al ver las imágenes del sushi me parece realmente apetitoso así que optó por eso.

- ¿Ya decidieron? - Pregunta Sara luego de unos segundos.

- Yo pediré pollo agridulce. - responde Alice.

- Yo sushi.

- Tu no puedes comer eso. - Me dice Sara con desconcierto. - Debes cuidarte, en nuestro estado hay ciertos alimentos que debemos evitar y el pescado crudo es uno de ellos.

- ¿En su estado?

Al ver el desconcierto de Alice Sara nota su error al hablar. No es que yo sea de esas que van a ir por ahí ocultando su embarazo o esperando un momento perfecto para informarlo, solo que en lo que va de semana ese detallito no ha salido de la boca de Daniel, ni la mia y diría que tampoco de Sara pero acaba de romper esa cadena.

Sara me mira buscando una respuesta así como Alice nos mira a ambas.

- Mi bebé tendrá un primito o primita con quién crecer. - le termina respondiendo mi amiga señalándome. Yo muevo mis manos a mis lados como una señal de "sorpresa".