Capitulo 8

2.3K 199 93
                                    

DANIEL WHITE

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

DANIEL WHITE.

Nunca en mi vida llegue a pensar que terminaría durmiendo en un incomodo mueble por ordenes de una mujer ¿Esa enana que se cree? Y lo peor del caso es que quise buscar las llaves para irme a mi departamento y resulta que la muy astuta se quedó con ellas.

Alana no es una persona problemática, de hecho, si puede solucionar todo hablando mejor para ella, tampoco es de andar lanzando órdenes solo porque sí. Pero eso no quita que es impaciente e impulsiva, una fuerte combinación; por eso no me sorprendió tanto la actitud que tomó en casa de Luke y el que botara a Karla, era de esperarse con mi inferencia y los comentarios entrometidos de la otra chica, su paciencia estaba en conteo regresivo. Igual me tomo un poco por sorpresa la forma agresiva y determinante de hablar.

Y para qué negarlo... Me prendió.

Tuvo razón en decir que mi secretaria no tenía nada que hacer ahí, yo ni siquiera la iba a llevar hasta que por curiosidad ví en mi teléfono la ruta del auto y quería pensar que estaba equivocado así que llamé a Alfred quien me confirmó lo que no quería. Estaba en el departamento de su novio. Se me había olvidado que estaba con ese imbécil, me ardió tanto la sangre que solo dejé que Karla fuera conmigo, algo inmaduro de mi parte.

Osea, yo le pongo un chófer-guardaespaldas con uno de mis autos a su disposición y ella lo primero que hace es ir hasta ese imbécil. Porque si, Alfred no es sólo un simple chófer, le pago para que también la cuide por el tiempo que ella esté aquí, no me gusta que ande a pié por ahí ni subiendo a taxis con desconocidos y apenas lo dijo la idea vino a mí, aparte, menos dejaría que anduviera por ahí sola con Noah cuando yo no estoy para llevarlos a donde sea que quieran ir.

Que me haya ido a sacar de la comisaría y lidiara conmigo borracho hasta el tope también era una buena excusa para tapar el hecho de que le puse un poco de seguridad, es fácil que lo vea cómo un tipo de pago y a éste no se podría negar ya que le es muy útil en lo que está aquí.

Me remuevo incomodo en el duro sofá, golpeo la cabeza contra la almohada con frustración. Quiero una puta cama.

Detengo mi faena al escuchar ¿Quejidos? ¿Escuché bien? Pongo más atención y si, escuché bien. Vienen de la habitación.

¿Que diablos?

Pasan minutos en los que los quejidos aumentan de volumen, voy hasta ahí y toco la puerta un par de veces.

- ¿Alana?

Los sonidos siguen pero no recibo respuesta. De repente, los quejidos son gritos.

Abro la puerta aterrado y la consigo en la cama, dormida. Se remueve entre las sábanas con desespero, se queja, murmura cosas que no entiendo y grita de vez en vez. Me acerco a ella de inmediato y la tomo de los hombros.

- Alana, despierta.

No lo hace, la remuevo con más fuerza y sorpresivamente busca quitarse mis manos de encima.

Enseñame a Querer Where stories live. Discover now