Your smile M.YG

♡ 38 ♥︎

Terminé yendo a mi habitación, para acostar a Kyree. Me costó bastante dormir lo ya que él parecía querer jugar.

Pero terminó agotado después de jugar con Holly y gatear un poco por la cama. Lo acomode con cuidado en su cuna y me encargué de taparlo para evitar que cogiera frío. Después dejé un pequeño beso en su frente y salí de la habitación.

Me parecía raro que Yoongi aún no viniera a dormir, ya lo cogió como costumbre dormir aquí y no falla ninguna noche. Caminé hacia su habitación, para ver qué tanto estaba haciendo a estas horas.

Pero me arrepentí al instante de haber entrado tan elocuente y confiada en su habitación. Él se cubrió a toda prisa con uno de los cojines de su cama ambientado en kumamon.

— ¡Lo siento! Debí llamar a la puerta, lo siento mucho. –me disculpe aguantando la risa, mientras él estaba todo sonrojado

Cerré de nuevo la puerta a toda prisa y me dirigí a la cocina por un poco de agua. Me sonroje al ver a Yoongi, esta vez con pantalones, entrar en la cocina. El también se sonrojo, mientras se rascaba la nuca nervioso.

— Yo siento lo que viste…

— No, no, la culpable soy yo, por entrar sin llamar.

— La verdad es que si, fuiste la principal culpable tanto por no llamar y por despertar esa parte de mi cuerpo que no puedo controlar… No es agradable.

Imitó mi acción agarrando un vaso de agua.

— Entonces… ¿Debería irme?

— ¡No! –Se avergonzó al sentir que había alzado la voz de más. – Quiero decir, no hace falta… somos adultos y es normal que suceda ¿no? Aunque te vayas seguiré teniendo sueños húmedos contigo, no puedo reprimir lo.

Me sorprendía lo sincero que era con sus emociones sexuales, por lo que noto, le es más fácil abrirse en ese ámbito, más que con sus emociones más elaboradas como la tristeza, el enfado o la felicidad.

— Entonces deberás aprender a convivir con ese extraño deseo que tienes conmigo.

— ¿Y si en algún momento no puedo reprimir lo más? – Preguntó de forma tímida.

Eso me pilló por sorpresa ¿Es alguna clase de indirecta?

— ahm…

— Deberíamos ir a dormir, mañana tienes terapia, club de madres y trabajo por la tarde. Será tu primer día en la empresa, así que debes dormir bien.

Me limité a asentir con la cabeza. Ambos nos dirigimos a la habitación y nos acostamos en la cama, al principio dándonos la espalda. Pero empecé a tener frío, demasiado frío. Giré levemente para mirar qué hacía él. El chico estaba boca arriba, con sus ojos ya cerrados.

Mentiría si dijera que no moría por abrazarlo y quedarme pegada a él como lapa, para soportar el frío de la Navidad.

— Si me miras tanto terminarás desgastando me.

— ¿hace frío verdad? –Pregunté con esperanzas de que él tomara la iniciativa. Pero no fue así, me dio la espalda.

— Si, lo hace.

Hinche mis mejillas con frustración, mientras miraba el techo y me abrazaba a mi misma. Tan ricos y sin calefacción, menudo desperdicio de dinero.

— Yoongi… ¿estás despierto?

— No.

— Pero me has respondido…

— Soy sonámbulo, duerme.