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Apartó su vista de la pantalla y me miró alzando una ceja, además de una pequeña sonrisa de lado, bastante atractiva y poco común en él.

Están entretenidos y a Kyree le gusta, mira como sonríe.

Ambos miramos a la parte trasera del coche, donde Kyree estaba sentado cómodamente en su sillita, con el peluche de shooky en una de sus manos y con una gran sonrisa. Yoongi empezó a conducir en dirección al edificio del club de madres.

No creo que esté sonriendo… creo que quiere su chupete, se le cayó al suelo del coche.

Tenía intención de agarrar el chupete, pero enseguida me regaño.

¡No toques eso del suelo! Después lo limpiare, tengo uno limpio en el bolsillo de mi pantalón, agarralo de ahí.

Hinche mis mejillas con frustración. Busqué con la mirada de cuál bolsillo se trataba, era uno de los delanteros, pero no sabía cual.

Tomé la iniciativa de revisar el primer bolsillo, primero calpe por encima, pero era difícil notarlo con el pantalón de vestir negro que llevaba.

No me tocó más remedio que meter la mano en el bolsillo, él se inclinó un poco, para dejarme lo más fácil. Pero no estaba.

No está.

Debe estar en el otro, recuerdo que lo guarde antes de entrar al coche.

Suspiré sintiéndome un poco avergonzada al pasar mi mano por su entrepierna para llegar al otro bolsillo, evitaba mirar lo que estaba tocando, prefería mirar a un punto fijo de su camiseta, concretamente a las letras que tenía en un lateral.

Eso no es el chupete… –susurró de forma que tuve que levantar la vista y encontrarme con la suya.

Trague en seco al sentir su respiración chocar con la mía y al ver que su nariz prácticamente tocaba la mía. ¿En qué momento nos acercamos tanto?

Aamh yo no…

Aún tienes la mano ahí…

Quité la mano, pero eso provocó que me tambalearse y tuviera que volver a poner la mano, pero un poco más brusco.

Lo siento… –Susurre bajo su atenta mirada.

La sonrisa de lado seguía pegada a sus labios ¿Por qué le estoy mirando a los labios? ¿Por qué cada vez está más cerca de los míos?

No pude hablar, su mano se posó en mi cuello mientras unía sus labios a los míos de forma apresurada. Me dejé llevar por su ritmo, no podía negarme porque me estaba gustando.

Sabía que después de esto me atormentaría por contradecirme de esta forma tan brusca. Ni yo misma me entiendo. Pero sentir sus labios sobre los míos me llevaba a otra dimensión, donde solo éramos él y yo. Sin problemas, sin responsabilidades, sin sentimientos agridulces por lo sucedido.

Él llevó sus dos manos a mis mejillas, para evitar que me alejara. La posición no era la más agradable, pero sí la más cómoda para que él pudiera llevar el ritmo. Ninguno de los dos atendía a las pitadas de los coches de atrás, eso no importaba ahora mismo.

Nos separamos lentamente, tarde más en abrir los ojos, porque sabía que él me miraba. Mordí mi labio inferior nerviosa, sin saber cómo apartarme. Su pulgar acarició mi mejilla, sentí como dejó un pequeño beso en la frente, que me hizo abrir al fin los ojos.

Debería empezar a conducir o al final nos detendrán por parar el tráfico.

Asentí levemente mientras me apartaba y volví a sentarme bien en mi asiento. Él me pasó el chupete, antes de iniciar de nuevo la marcha. No hablé en lo que quedaba de trayecto, me mantuve en silencio sin saber qué decir o hacer.

Your smile M.YGWhere stories live. Discover now