Santa Coming For Us pt. 2

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Parte 2:

Por la mañana la emoción de Uta los despertó a todos, la familia Silvers completa estaba en pijama bebiendo chocolate caliente y comiendo dulces, esperando con ansias a que la pequeña Uta abriera su siguiente regalo. La niña destrozó el papel festivo sin compasión sacando unos nuevos audífonos qué iban a reemplazar aquellos que rompió ese maldito niño. Los nuevos audífonos parecían conchas celestes con su nombre grabado a cada lado.

Al verlos le encantaron tanto que sus ojos y sus labios se estremecieron. —¡Papá!— Miró muy conmovida a Shanks.

Se los colocó de inmediato. Iba a usar todo lo que le dieran ese día, absolutamente todo. Uno de los regalos venía en una caja con un gran lazo que decía "de tu querida madrina". Dentro había un precioso vestido color mandarina.

Ella dio de saltitos en su sitio, era el mismo vestido que le dibujó a Buggy y desapareció de su cuaderno. Estrechó la vista en dirección a este y su padre solo fingió ignorancia. Shaky la llamó ya que ella no guardó su regalo entre los demás, también llevaba una cajita con forma de cofre del tesoro, un trabajo completo que ella misma mandó a hacer porque la bebé Shanks tenía su misma vivida imaginación. Uta abrió la caja plana mientras su abuela la sostenía y sus ojos brillaron con la misma intensidad que las joyas que estaba viendo.

—Toda princesa merece su propia tiara, de lo contrario no puede llamarse una princesa— Tomó la tiara y la colocó en la cabeza de la pequeña. —Por fin las joyas de mi familia pueden pasar a la siguiente generación.

—Deja algo para las nietas que te dará Dracule— Se burló Buggy sin piedad, ganándose una mirada resentida en su dirección.

Shaky se rio —También tengo joyas para las niñas de Dracule. Tendré joyas para todas mis nietas, así que tranquilo Buggy. ¿Cuántas serán, mi lord de la oscuridad?

La mirada de Dracule expresaba claramente un "Voy a matarte". Para librarse del enojo de su hermano el peliazul sacó desde su espalda un enorme regalo para su pequeña.

Ella no tardó en descubrir dentro del paquete una enorme cazadora de estilo universitario, en colores rojo y blanco como su cabello. Shanks aprovechó la oportunidad para abrazar por detrás a Buggy —¿No es demediado grande?

En efecto la prenda era demasiado grande para su niña, producto de un gran error. Ellos diseñaron el poleron juntos, buscando una versión juvenil de una diva que presentaba su música en un vídeo, el problema fue qué las medidas que le dio a Inazuma se confundieron con las de una drag en competencia y por eso la cazadora terminó siendo más grande de lo que debería. Quiso cambiarlo hasta que pensó que su princesa crecía a una velocidad acelerada, tan rápido como el idiota de su padre, por lo que no tardaría en poder usar ese fabuloso polerón a su medida.

—¡Me encanta!— Uta se lo puso encima y parecía que llevaba una manta.

Buggy quería llorar, no era solo demasiado grande, era tan gigantesco que le quedaría bien a él. Quería quitárselo y ocultarlo hasta que midiese lo suficiente para usarlo adecuadamente, pero Uta se lo puso y no se lo quitó en ningún momento. El de cabello azul se sintió muy avergonzado cada vez que la veía. No encontraba la oportunidad ni la brecha para poder quitárselo, mientas ella jugaba con un enorme teclado profesional que le regaló Crocodile. 

Completamente estresado salió al patio usando uno de los chalecos feos que su madre le regaló a todos en modo de broma.

El cielo se había cerrado en nubosidad anunciando que iba a nevar en cualquier momento. Hacía un frío espantoso también pero el peliazul no quería estar adentro de la casa. No después de escuchar el deseo de su princesa esa noche, ella esperaba ver una estrella fugaz y pedir algo así para que nunca se fuera. Ciertamente no esperaba que esas palabras le afectaran tanto, siempre se mentalizaba que se iría una vez Uta cumpliera una edad decente, entonces armar una familia o lo que sea después de ello, sin embargo era un plan estúpido y lo sabía. Para empezar no quería tener una pareja, no quería comprometerse con nadie a un nivel personal y mostrar sus sentimientos a nadie más. Ser vulnerable y corresponder afectivamente eran cosas que le desagradaban.

Custodia compartida.(Efecto mandela)Where stories live. Discover now