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*narra Maria*

Tras besarlo, me separé de él, había sido un beso corto impulsivo, me apeteció en ese momento y lo hice aunque no sabía como iba a reaccionar el

— ¿Te ha quedado claro ahora?
— Mmm no mucho vuelve a hacer eso que has echo para que me quede más claro -dijo sonriendo y me reí antes de volver a besarse-

Esta vez el beso duro más, el agarró mi cintura mientras yo puse mi mano en su mejilla. Nos separamos y Pedri me miro antes de sonreír.

— Creia que te gustaba Gavi -dijo-
— Yo también lo creia -suspire- pero escuchar todo eso me ha echo abrir los ojos
— Me alegro
— Y yo -sonrei- deberíamos de irnos a dormir

Empezamos a subir las escaleras, Pedri me acompaño hasta la puerta de la habitación de invitados que se había convertido más en mia que de invitados.

— ¿Deberíamos darle la satisfacción a estos dos pesados de que nos hemos besado? -dijo apoyándose en el marco de la puerta, como no me había dado cuenta de lo bueno que estaba-
— Creo que aún pueden intentarlo un poco más -sonrei- buenas noches -le di un beso-
— Buenas noches -me devolvió el beso e hizo el amago de irse- espera -dijo antes de que cerrara la puerta y volvió a besarme- ahora si -rei- hasta mañana preciosa -dijo esta vez yéndose de verdad-

Me lleve toda la noche pensando en el, en el beso y en lo guapo y buena persona que era, no se me borró la sonrisa en ningún momento y aunque sólo hayan sido besos insignificantes me gustaría ver cómo va creciendo nuestra relación.

A la mañana siguiente me desperté por culpa de los rayos de luz que entraban por la ventana. No sabía si los demás estaban despiertos así que baje, Pedri y Gavi estaban en el salón hablando animadamente y riéndose entre ellos mientras que Lucia estaba abrazando a su novio con cara de orgullo.

— Buenos días -dije sonriendo- que alegres os veo
— Buenos días -dijo Gavi- ¿como ha dormido la princesa de la casa después de lo de anoche? -lo mire extrañada y luego mire a Pedri el cual me dijo que no sabía nada con los labios-
— Bi...bien ¿que pasó anoche? -me hice la tonta-
— Te dije que no había pasado nada y que no la ibas a pillar desprevenida -le dijo Pedri-
— Pero hemos estado a punto -dijo Lucia-
— ¿Por qué estáis tan alegres?
— ¿Te acuerdas de las cámaras que había el sábado cuando viniste a verme? -asenti, era cierto había muchas cámaras grabando el entreno pero me pareció una cosa normal- pues era porque han estado grabándonos para hacer una serie y mañana por la noche es la premier
— ¿Has ido a ver un entrenamiento en el que yo no estaba? -dijo Gavi- que feo está eso
— No todo el mundo gira en torno a ti -le dije- qué guay una serie me alegro por vosotros chicos
— Tenemos que ir a comprarnos algo para mañana -dijo Pedri-
— Pues vamonos de compras -dijo Lucia-
— Siii -dije ilusionada, me encanta ir de compras-
— No por favor no me sometáis a esa tortura -dijo Pedri-
— Venga os tenéis que comprar ropa para mañana por la noche y nosotras no tenemos nada que hacer os acompañamos y os ayudamos -dije-
— Está bien -aceptaron ambos-

Tras desayunar cada uno subió a sus respectivas habitaciones a terminar de arreglarnos para irnos de compras. Cuando ya estaba lista alguien llamo a la puerta.

— ¿Puedo pasar? -dijo Pedri-
— Si entra ya estoy lista -entro-
— Si te pones así de guapa para ir a comprar no me quiero imaginar lo que te pondrás mañana
— ¿Mañana para que? -lo mire confusa-
— Para la premier -dijo-
— Tendrías que pedírmelo -sonrei y Pedri agarro mi cintura pegándome a él-
— ¿Vendrás a la premier no? -dijo besándome-
— No lo se vuelve a intentarlo -me volvió a besar- claro que iré no me lo perdería por nada -le di un beso en la mejilla- vamos nos estarán esperando
— No se como voy a aguantar toda la tarde sin besarte -dijo y sonreí como una tonta ante sus palabras-
— Tendrás que hacerlo

La casualidad Where stories live. Discover now