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*narra Gavi*

Estábamos en el hotel cuando Ferran se acercó con su móvil a enseñarme una cosa, no sabía que era y que era lo que le sorprendía ya que tenia cara de sorprendido.

— ¿Que pasa? -le pregunté-
— ¿Estas no son tu novia y María? -dijo enseñándome el instagram del Madrid donde aparecían María y Lucia sentadas en la grada-
— Son ellas ¿que hacen allí?
— No lo se solo se que están allí
— Yo a María la mato -dije-

¿No le parecía suficiente haber ido ella que ahora tenía que llevar a mi novia también? Es cierto que para mi novia eso era un sueño pero, ¿tenía que ser María precisamente la que la llevara?

Fui corriendo a Pedri para decírselo, no entendía nada yo la he querido siempre, he pensado en ella para todo y he estado ahí cuando me ha necesitado ¿y me la devuelve yéndose no una sino dos veces al estadio del Madrid?

— Mira -dije poniéndole el móvil a Pedri en la cara- tu novia a llevado a Lucia al estadio del Madrid -Pedri cogió mi móvil y lo miro-
— Tiene que haber una explicación -dijo el- ademas deberías de estar feliz por Lucia, está cumpliendo su sueño de ir a ver al Madrid
— Me da igual -dije y vi como la cara de Pedri cambió-
— Gavi ven -dijo agarrándome del brazo y separándome de los chicos- no puedes ponerte así cada vez que las chicas se acerquen a alguien del Madrid, da igual son chicos que se llevan bien con ellas ni nada
— Pero es el equipo contrario -dije- y encima María lo ha echo dos veces ya
— A María le cae mal Vinicius y Ceballos tanto como a ti -dijo- pero no te has parado a escucharla -añadió- es un equipo más y son chicos que si ella o Lucia se llevan bien déjala pero quiero que sepas que te estás comportando como un niño pequeño con María

Eso me hizo reflexionar, ni siquiera le había dejado explicarse ¿estaba cometiendo un error con ella? Tal vez si pero ya no había marcha atrás era ella la que no quería hablar conmigo ahora.

Estuvimos charlando sobre el partido de mañana, sobre las nuevas jugadas que habíamos planeado y sobre las ganas que teníamos de ganar este partido.

Las chicas llegaron y todos dejamos de reírnos, Lucía traía una bolsa del Madrid mientras que María venía con las manos libres. Pedri se levantó y se fue a hablar con María mientras que Lucia se acercó a mi

— Hola -dijo, en realidad no estaba enfadado con ella era su sueño y tenía que respetar que había tenido la oportunidad-
— Hola -le dije- ¿que tal hoy? Habéis estado con los del Madrid ¿no?
— Si María se encontró con Vinicius y como ya se conocían nos invitaron al entrenamiento y luego fuimos a ver el estadio
— ¿María se encontró con Vinicius? -le pregunté-
— Bueno las dos y María empezó a hablar con él y nos invitó a ir al entrenamiento
— Ah -dije- ¿y como te lo has pasado? -me molestaba un poco pero era el sueño de lucia no podía decirle nada-
— Muy bien me ha encantado conocer el estadio y a los del equipo -dijo-
— Me alegro de que hayas cumplido uno de tus sueños -dije abrazándola-
— ¿Seguro que no estás enfadado ni nada conmigo?
— No estoy enfadado contigo -dije acariciando su mejilla- no me hace mucha gracia que estés con los del Madrid pero si es tu sueño lo respeto -Pedri me había echo abrir los ojos-
— ¿Entonces por qué estás enfadado con María? -dijo y a mire- a ver que tienes tus razones estuvo mal lo que pasó y eso pero si me has perdonado a mi ¿por que no lo has echo con ella?
— Lo de María es diferente, ella me mintió por irse con un chico del que la hemos intentado proteger siempre y encima se pone a hablar con mis enemigos
— Tienes razón es diferente -dijo, ¿quizás Pedri no tenia razón? A lo mejor lucia tenía razón-

*narra Pedri*

Estábamos relajados en el hotel y las chicas aparecieron, quería hablar con María para que me explicase porque había vuelto a ir a un entrenamiento del Madrid y había estado con ellos de nuevo así que cuando llego me acerque para hablar con ella.

La casualidad Where stories live. Discover now