116

379 11 4
                                    

*narra Gavi*

Fui hacia donde estaba Pedri un poco asustado, no sabía que era lo que iba a decirme y después de mi finde semana no me apetecía nada tener que pelearme con el

— ¿De que quieres hablar conmigo? -dije nervioso-
— ¿Estas saliendo con María? -me pregunto-
— Si -dije agachando la cabeza, de todas formas ya lo sabía por María-
— Joder -dijo susurrando y suspirando-
— Pedri -dije- arreglemos esto por favor, quiero volver a ser tu mejor amigo y ser los que éramos antes -añadi- nos estamos cargando al equipo
— Tu te estás cargando al equipo yo no he echo nada
— Bueno pues yo me estoy cargando al equipo -dije- pero por favor quiero que entiendas que quiero lo mejor para María -añadi-
— Yo también quiero lo mejor para ella -dijo- y soy feliz si ella lo es pero deberías de haberme tenido en cuenta
— Lo siento Pedri -dije- no sabes lo que me jode estar así contigo y lo que me gustaría volver a ser los que éramos
— No creo que pueda ser lo que era contigo antes -dijo- pero podemos intentar volver a ser compañeros de equipo -añadio- el equipo no tiene culpa de esto
— ¿En serio? -dije sonriendo como un tonto-
— Pero no te hagas ilusiones solo compañeros de equipo no quiero saber nada de ti fuera de aquí
— Lo entiendo -dije antes de que se fuese-

Estaba muy feliz ya que eso era un paso, no me había perdonado pero al menos no tendríamos tensión en el equipo.

Salí al campo súper contento e hice el que podría haber sido uno de los mejores entrenamientos de mi vida, tenia a la chica de mis sueños y además de eso Pedri empezaba a entender la situación

El día de entrenamiento estuvo muy bien, tuvimos que almorzar en la ciudad deportiva y luego seguir entrenando.

Cuando terminamos de comer fuimos a entrenar, el ambiente en general se había vuelto más relajado desde que nos habían visto a Pedri y a mi tener un trato medianamente normal el uno con el otro

Compre pizza para cenar ya que sabía que era una de las comidas favoritas de María y como se había quedado todo el día sola y yo estaba contento por lo de Pedri quise tener un detalle con ella

Cuando llegue estaba limpiando la casa, tenía un moño despeinado y una de mis camisetas que le quedaba como un vestido, nunca me había parecido tan guapa como en ese momento

La abrace por la espalda y le di un beso en el cuello mientras que ella se quitaba los cascos y me miraba sonriendo

— Hola guapa -le dije-
— Hola -dijo- ¿que tal el entrenamiento? -dijo empezando a peinarse- perdon por mis pintas -frene sus manos-
— ¿Sabes que estás guapísima así no? -sonrio- tengo algo que contarte y -añadi sacando la pizza- traigo pizza para compensarte que hayas estado toda la tarde sola
— No tenías porque -dijo-

Empezamos a cenar, no sabía si contarle en realidad lo de Pedri ya que sabía que se iba a poner mal después de estar pasando por unos días difíciles

— Amor tengo que contarte algo -le dije-
— Dime
— Pedri y yo hemos estado hablando esta mañana y a aceptado que seamos compañeros de equipo otra vez, no quiere saber nada de mí en general pero hoy hemos estado bien en el entrenamiento
— Vaya que bien -dijo un poco decepcionada- me alegro mucho de que estés empezando a solucionar las cosas con el
— ¿Estas bien? -le pregunté-
— Si tranquilo -mentira-
— ¿De verdad? -dije cogiendo su mano-
— ¿Todo esto está mereciendo la pena?
— ¿El que? -le pregunté
— Nosotros -dijo- ¿merece la pena todo lo que está pasando por nuestra relación?
— Pa...para mi si -dije mirándola- ¿y para ti? -le pregunté asustado-
— No lo se -dijo con cara de pena y agobio- cuando estoy contigo si la merece pero cuando estoy aquí sola o cuando veo a Lucia o a Pedri que no me hacen caso pienso en que hubiese pasado si tú y yo no -no pudo terminar porque empezó a llorar y fui a abrazarla- lo siento
— Tranquila -dije un poco decepcionado, para mi siempre iba a merecer la pena estar con ella- es normal que te sientas así
— No no es normal pero no se que me pasa -dijo- desde que Lucia no está conmigo me siento vacía -añadio- y ahora con lo de Pedri
— Cariño -dije acariciando su mejilla- Lucía ha sido tu amiga desde siempre es normal que estes así
— Pero a ti Pedri te ha perdonado después de todo -dijo-
— Solo por el bien del equipo -dije- no es culpa mía que lo haya echo
— Ni mia -dijo un poco enfadada y suspiró-
— ¿De verdad crees que nuestra relación no merece la pena?
— No he dicho eso
— Pero lo piensas -dije- piensas en qué pasaría si Lucia siguiese conmigo y tú siguieses con Pedri -se quedó callada- ¿ves? lo piensas -la mire- no me lo puedo creer
— Déjame explicarme -dijo-
— No te preocupes -dije levantándome de la mesa- creo que ya te has explicado suficientemente bien

Subí las escaleras muy triste, creía que ella sentía por mi lo mismo que yo sentía por ella. Fui a mi habitación y me tumbé en la cama a pensar, yo si sentía que todo esto merecía la pena.

La escuche llamar a la puerta, no tenia ganas de hablar con ella ahora ya que me había decepcionado mucho su respuesta.

— Gavi -dijo- ¿podemos hablar? -me hice el dormido- bebe por favor no lo decía en serio

No le hice caso, la escuche como se acercaba cada vez más a la cama y como ponía su cabeza en mi hombro intentando ver si estaba realmente durmiendo o no

— Amor por favor -dijo- yo te quiero mucho y no me arrepiento de estar conmigo
— No te arrepientes pero si dices que no sabes si merece la pena
— Lo siento -dijo- me enfadé porque Pedri te haya perdonado a ti y a mí aún todavía ni me hable
— No me ha perdonado solo quiere que nos llevemos bien por el equipo
— Bueno pero os habláis -dijo y acaricio mi mejilla cuando me di la vuelta para mirarla- ¿crees que estaría contigo si no creyese que vale la pena realmente? -me dio un beso- es un momento difícil para mí por lo de Lucia y Pedri por eso algunas veces estoy mal o pienso cosas que realmente no quiero decir de verdad -añadio- te quiero muchísimo
— Te entiendo perfectamente bebe pero entiéndeme tú a mi -dije- me estás diciendo que no estás segura de que si esto merece la pena -añadi- yo tengo muy claro lo que siento por ti y aunque no me hable nadie más en el mundo te seguiría eligiendo a ti -sonrio-
— Lo se no ha estado bien por mi parte haberte dicho eso -dijo- quiero estar contigo de verdad pero a veces mi cabeza va más allá sabes de sobra como soy, no quiero ser celosa y que te pelees conmigo también ahora que Pedri lo está haciendo
— ¿Entonces no te arrepientes de esto? -le pregunté asustado-
— Claro que no me arrepiento -me dio un beso- no quiero separarme de ti nunca -ahora fui yo quien la beso-
— Ven aquí -dije abriéndole los brazos para que se acurrucase-

Esa noche dormi muy agusto, la había escuchado hablar sobre nuestra relación y de que realmente me quería, estaba seguro y deseando de que llegara el día en que se haga público dentro de muy poco nuestra relación y estaba deseando que María me dijese que si para confórmalo

La casualidad Where stories live. Discover now