137

178 6 0
                                    

*narra María*

Hice caso a lo que Gavi me había pedido y nerviosa empecé a prepararme, agradecí haberme traído un bañador y me lo puse sin saber para que sería

Mientras me vestía intentaba encontrar las palabras adecuadas para sonar lo más calmada posible y que a su vez le quitase importancia a la historia que iba a contarle a Gavi, no iba a ser una noche fácil para mí

Avise a Lucía y a Pedri de lo que pasaba para que no contasen con nosotros en la fiesta de esa noche o al menos al principio, no tenía ni idea de cuáles eran los planes de Gavi

Me vestí y me maquille y cuando estuve lista suspiré intentando soltar todos los nervios que tenía antes de salir por la puerta de la habitación

Al salir me encontré con Lucía, Pedri y Ferran los cuales se dirigían hacia abajo para dirigirse al restaurante al que iban a ir antes de irse de fiesta

— Hola -dije cuando los vi-
— Pero bueno dónde vas así de mona -me pregunto Lucía- me encanta el bañador junto con los vaqueros blancos
— ¿Vas a arreglar las cosas y ahora vais para el restaurante o ya está todo solucionado y veniis directamente? -me preguntó Ferran-
— No tengo ni idea -admití- yo solo sé que tengo que irme arriba y que tenía que tener puesto bañador
— ¿Con quién has quedado? -me pregunto Lucía-
— Gavi me ha dejado una nota encima de la cama diciendo que quiere verme
— Entonces estos dos no salen hoy -dijo Ferran- se reconciliarán y se irán a estrenar la cama del hotel
— Eres un bruto -dijo Pedri-
— Todos sabemos que lleva la razón -dijo Lucia-
— No porque puede ser que no arreglemos nada
— Sois María y Gavi, claro que vais a solucionar las cosas si no lo hacéis vosotros nadie lo hará -añadio Pedri de nuevo- estate tranquila y confía en él seguro que acabais reconciliandoos
— Gracias Pedri -dije sonriéndole-
— Si decidis venir avisadnos, vamos a ir a cenar y supongo que luego iremos a la discoteca, no podemos salir de aquí sin el permiso de algún entrenador -dijo Ferran-
— Esta bien os avisaré, luego nos vemos
—Adios -dijeron los tres a la vez-

Y dicho eso y sin poder retrasar más el momento hice caso a la nota de Gavi y me dirigí hacia la piscina. El trayecto en ascensor hasta la piscina se me hizo eterno, lo único que hacia era seguir pensando en que era exactamente que le iba a contar y como se lo iba a contar.

Cuando salí del ascensor lo primero que vi fue un camino de pétalos de rosas rojas en el suelo indicándome hacia donde tenia que ir exactamente.

A continuación vi muchas velas con la piscina iluminada junto con una mesa decorada con flores, una cesta de picnic, una vela y dos sillas, sin duda Gavi lo había preparado todo precioso y yo no podía estar más nerviosa

Lo busqué con la mirada hasta que apareció vestido con un bañador y un polo a juego, estaba muy guapo y eso me hizo ponerme más nerviosa

— Hola -dijo-
— Gavi -dije- esto está precioso
— Quería que te sintieras cómoda -añadió- quería pedirte perdón por todo lo de esta tarde tienes razón si no puedes contármelo lo entiendo
— Tu no eres así -dije- sé que quieres una razón y sé que te la debo -añadí- pero es muy difícil para mí
— Yo solo quiero saber porque un miserablemente como él puede tener tanto poder sobre ti pero de verdad entenderé que no quieras contármelo, tus cosas con él son cosa vuestra yo solo tengo interés en lo que tenga que ver con nuestra relación

Ahí entendí que tenía que decírselo, tenía la suficiente confianza con él para contárselo pero a la vez me avergonzaba contárselo, saber que él lo sabe es como reconocer que había pasado y no quería reconocerlo pero merecía saberlo

— Voy a contártelo -lo mire y empecé a temblar bajo su atenta mirada- pero quiero que no se lo digas a nadie ni me juzgues ni hagas nada por favor
— Claro amor pero me estás preocupando -dijo cogiendo mis manos- no tienes porque ponerte a temblar
— Es que estoy nerviosa -dije- siéntate -añadí para sentarnos a continuación-

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Apr 29 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

La casualidad Where stories live. Discover now