30

556 20 0
                                    

*narra Gavi*

— Ya decía yo que esa voz y los ruidos de anoche me sonaban familiar -dijo Marcos metiendose en nuestra conversación y provocando que mi amigo lo mirase con cara de querer matarlo-
— Eso quisieras tu -dije-
— Y tú -me dijo- o me vas a negar que escuchándolos ... -fui a volver a pegarle pero Pedri me freno-
— No lo escuches -dijo Pedri, verlo tan calmado me podía de los nervios-
— Fue maravilloso, es que esta buenísima -dijo y fui yo el que aguantó a Pedri antes de que le pegara una buena paliza-
— No le hagas caso sólo quiere provocarte y que te expulsen, es mentira María no se acostaría con alguien como él -le dije-
— Chiquitín -me llamo Morata-
— Tienes tan baja autoestima que dejas que te digan chiquitín -se rio-
— Es un apodo cariñoso porque a diferencia de ti a mi me quieren los de mi equipo
— Yo me llevo muy bien con Asensio, y ¿sabes quien se lleva muy bien con el? Tu novia -ahora si explote-
— Te voy a matar hijo de puta -fui a pegarle pero Morata me paro-
— Ya déjalo estar -me dijo y los tres nos fuimos-
— Pedri la próxima vez avísame para el trío ella estará encantada -le grito a Pedri-
— Pasad de el solo quiere provocaros
— Pues lo ha conseguido -dijo Pedri-

Agradecí que fuese el final del entreno porque sino juro que iba a pegarle un balonazo que se iba a quedar sin pelotas. Pedri se fue rayado al hotel, lo que había dicho Marcos lo había dejado confundido.

— ¿Y si es verdad? -dijo de repente-
— ¿El que?
— Lo que ha dicho -me miro- y si María
— No sigas -imaginarme eso en mi cabeza me provocaba arcadas- no creo que hubiese echo eso y no se lo hubiese dicho a Lucia
— Ella dijo que Marcos fue el primer beso de María a lo mejor también -tenia que decirle la verdad-
— Marcos no fue
— ¿Entonces fuiste ... -no pudo terminar-
— S...si -me miro- pero aún así no debería de importarte su pasado sino el presente y el futuro que tiene contigo -dije-
— Supongo que si

Llegamos al hotel, Pedri se había quedado un poco desanimado así que decidí llamar a todos para ir abajo y entretenerlo un poco. Me daba mucha impotencia que el día tan perfecto que había tenido se lo hubiese cargado un subnormal.

Llegamos y ninguna de las chicas estaba en el hotel, seguramente Sira, María y mi hermana se habían llevado a torturar a mi novia a tiendas pijas de por aquí.

Nos duchamos y cuando íbamos a salir de las habitaciones para irnos abajo las chicas aparecieron cargadas de bolsas.

— Veo que habéis arrasado con todas las tiendas de Qatar -nos reímos- ¿te han echo entrar en pijolandia? -le dije a mi novia dándole un beso-
— No ha sido tan malo
— Hola -dijo María dándole un beso el cual fue medio correspondido por Pedri- ¿te pasa algo?
— No tranquila -le dijo Pedri- ¿vamos? -dijo sin prestarle atención a su novia-
— Si vamos -le respondí-
— ¿A donde vais ahora? -pregunto mi hermana-
— Abajo vamos a hacer una pequeña reunión los demás chicos están allí veniros os esperamos abajo
— Vale -dijo Sira-

Las chicas siguieron su camino hacia las habitaciones y nosotros hacia el ascensor. Mire a Pedri estaba enfadado, la iba a cagar si seguía así.

— Tío olvídalo ya -le dije- Marcos sólo lo hace para dar por culo
— ¿Pero y si es verdad? -me pregunto-
— Te puedo asegurar que es mentira -dije-
— ¿Como lo sabes?
— Porque si ha tardado contigo mucho tiempo imagínate con el -lo mire- ademas María tardo poco tiempo en darse cuenta de cómo era él en realidad -le di un beso en el hombro- venga anda que nos lo vamos a pasar bien y olvídate de eso -le di un abrazo-
— Gracias tío

*narra Maria*

Me había quedado súper confundida con ese recibimiento de Pedri, había sido súper frío conmigo después de no habernos visto en todo el día. Mis dudas empezaron y si después de lo de anoche no había sido como él esperaba e iba a dejarme, o simplemente anoche se dio cuenta de que no le gusto

La casualidad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora