21. Merecer algo mejor.

28.9K 1.7K 1.8K
                                    


NARRA SOFÍA

Agarro la botella y tomo asiento mientras bebo agua por tercera vez en lo que va de ensayo.

La profesora Hest, se ha marchado a terminar de zanjar unos asuntos sobre el decorado para el musical, dejándonos a Brent y a mi solos en la sala de ensayo.

—Tienes que esforzarte más si quieres que Hest se sienta orgullosa y satisfecha con tu interpretación —comenta Brent, quien coge una silla y se sienta a mi lado.

Desvío mi mirada hacia el castaño y doy un suspiro.

—Decirlo es fácil, conseguirlo ya es otra cosa —respondo cansada y con la voz entrecortada—. Pensé que actuar en un musical no sería tan complicado pero veo que me equivoqué —añado frustrada y pasando mis manos por mi cara.

Brent agarra mis manos y hace que me quede frente a él.

—El problema es que piensas mucho en las cosas y te avergüenzas de lo que haces, si dejas esos miedos atrás todo fluirá mejor —me aconseja.

—Pero es que la vergüenza no desaparece de un día a otro —argumento.

—Pues ve perdiéndola poco a poco —sugiere, quitándome la botella de agua de la mano y agarrando mi mano para levantarme.

—¿Qué haces? —pregunto un tanto extrañada por su acción.

De pronto suelta mi mano y saca de su bolsillo su móvil. Brent comienza a teclear cosas en el y luego lo deja a un lado dejando que suena una música que no tardo en reconocer, es "Staring at it" de SafetySuit.

—Ven, bailemos —propone ofreciéndome su mano.

Dudo durante unos segundos si aceptar su propuesta o no. Brent es quien finalmente toma la iniciativa y termina agarrando mi mano.

Él tira de mi y coloca sus manos alrededor de mi cintura mientras que yo pongo mis manos sobre sus hombros.

La canción sigue sonando y Brent comienza a marcar el ritmo moviéndonos de un lado al otro.

—¿Por qué estamos bailando? —cuestiono sin saber aún el motivo de su propuesta.

—Porque si te atreves a bailar este tipo de canción así de pegada conmigo es que has superado parte de tu vergüenza —responde haciendo que me de cuenta de la situación.

Miro a mi alrededor y no hay nadie, solo estamos él y yo, pegados, bailando una canción lenta. ¿Que carajos ha pasado para que terminemos así?

—Muy astuto —le halago.

Él se queda boquiabierto con lo que acabo de decir.

—¿Me has dicho algo bueno? —pregunta con incredulidad mientras seguimos bailando.

Yo ruedo mis ojos y me río ante su ocurrencia.

—Siempre sabes cómo cagar la situación —comento entre risas.

Él finge hacerse el ofendido hasta que después se comienza a reír conmigo.

—Es un don que viene por naturaleza, solo algunas personas los tenemos —dice alzando las cejas.

Estar de esta manera con Brent me hace pensar en lo mal que lo juzgué al principio pensando que era un engreído que solo sabía mirar por sí mismo. Sin embargo, ahora que lo conozco un poco mejor me doy cuenta de que no es así.

Detrás de esa fachada de idiota que muestra a los demás se esconde un chico al que le gusta ayudar a los demás.

Lo que queda de canción nos la pasamos bailándola en silencio. No sé porque pero me siento cómoda y segura estando así con Brent. Es tanta la confianza que me transmite que en un momento dado decido apoyar mi cabeza en su hombro y dejar que mi cuerpo se mueva solo.

Cumpliendo los catorceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora